No puedes ver nada, está muy oscuro.\n Llama especialmente tu atención ¿Qué haces? \n ¿Y bien?\n ¿Qué más? \n Tus órdenes:\n ¿Cómo? Por favor prueba con otras palabras.\n No puedes ir en esa dirección.\n ¿Perdón?\n Llevas: (puesto/a) ningún objeto.\n ¿Seguro? \n ¿Juegas de nuevo? \n Adiós... OK.\n Has realizado turno s .\n Tu puntuación es del %.\n No llevas puesto eso.\n No puedes, ya llevas eso puesto.\n Ya tienes {OREF}.\n No ves eso por aquí.\n No puedes llevar más cosas.\n No tienes eso.\n Pero si ya llevas puesto {OREF}.\n S N Más... > El tiempo pasa...\n Coges {OREF}.\n Te pones {OREF}.\n Te quitas {OREF}.\n Dejas {OREF}.\n No puedes ponerte {OREF}.\n No puedes quitarte {OREF}.\n No puedes quitarte {OREF}. ¡Tienes demasiadas cosas en las manos!\n Desgraciadamente {OREF} pesa demasiado.\n Pones {OREF} en Me temo que {OREF} no está en , y .\n No tienes {OREF}.\n No llevas puesto {OREF}.\n .\n Eso no está en ningún objeto\n Fichero no encontrado.\n Fichero corrupto.\n Error de E/S. Fichero no grabado.\n Directorio lleno.\n Disco lleno.\n Nombre de fichero no válido.\n Nombre del fichero: ¿Perdón? Por favor prueba con otras palabras.\n La balsa está desierta! ¡Por el Gran Zurcidor! ¡Un Gnomo sin sombrero! No ha llegado aún el día en que pueda ver esto. Como todo buen Gnomo Zapatero (GZ) tu vela permanece únida a tu sombrero... ¡y ahí debe quedarse! Las fotos de tus múltiples viajes (la Feria del Calzado Menudo en China, el cruzero por los fiordos noruegos, la visita a Erebor para ver a tu primo Glôin) se mezclan con fotos de tu infancia (cumpleaños, tu primer baño) y aquella en la que posas orgulloso junto con el Zapatero Potentado (ZP), presidente... del gremio de los Gnomos Zapateros. No tiene nada más destacable. Tu estantería no puede albergar el gran monton de libros que has acumulado a lo largo de los años. Amontonados, del derecho o del reves, en estraños ángulos, tu libros reposan esperando el momento en que vuelvas a releerlos. Tus gustos literarios son eclécticos: historia antigua, biografías, un par de libros técnicos... Uno de los libros, que permanecía en un precario equilibrio cae al suelo. Se trata de un pequeño libro, breve, no muy grueso, una edición barata que compraste en un mercadillo de segunda mano. Uno de los escasos líbros humanos que conservas en tu biblioteca. Lees la primera página: Stanislaw Lem, Ciberíada, Expedición tercera o los dragones de la probabilidad Título del original en polaco (humano): Cyberiada Traducción al gnómico: Jadwiga Mauricio Editorial: Alianza 'Trurl y Clapaucio eran alumnos del gran Cerebrón Emtadrata, quien durante cuarenta y siete años había enseñado en la Escuela Superior de Neántica la Teoria General de Dragones. Como sabemos, los dragones no existen. Esta constatación simplista es, tal vez, suficiente para una mentalidad primaria, pero no para la ciencia. La Escuela Superior de Neántica no se ocupa de lo que existe: la banalidad de la existencia ha sido probada hace demasiados años para que valga la pena dedicarle una palabra más. Así pues, el genial Cerebrón atacó el problema con métodos exactos descubriendo tres clases de dragones: los iguales a cero, los imaginarios y los negativos. Todos ellos, como antes dijimos, no existen, pero cada clase lo hace de manera completamente distinta. Los dragones imaginarios y ceracos, no existen, pero de modo mucho menos interesante que los negativos. Desde hace mucho tiempo se conoce en la dragonología una paradoja, consistente en el hecho de que, si se herboriza a dos negativos (operación correspondiente en el álgebra de dragones a la multiplicación en la aritmética corriente), se obtiene como resultado un infradragón en la cantidad 0,6 aproximadamente. A partir de este fenómeno, el mundillo de los especialistas se dividía en dos campos, de los cuales uno sostenía que se trataba de la parte de dragón contando desde la cabeza, y el segundo afirmaba que había que contar desde la cola.' 'Trurl y Clapaucio tuvieron el gran mérito de esclarecer lo erróneo de ambas teorías. Fueron ellos quienes aplicaron por primera vez el cálculo de probabilidades a esta rama de la ciencia, creando, gracias a ello, la dragonología probabilística. Esta última demostró que el dragón era termodinámicamente imposible sólo en el sentido estadístico, al igual que los elfos, duendes, gnómos, hadas, etc. Los dos científicos calcularon en base a la fórmula general de la improbabilidad los coeficientes del duendismos, de la elfiación, etc. La misma fórmula demuestra que para presenciar la manifestación espontánea de un dragón habría que esperar dieciséis quintocuatrillones de heptillones de años más o menos. No cabe duda de que el problema hubiera quedado como un simple curiosum matermático, si no fuera por la convencida pasión constructora de Trurl, quien decidió investigar la cuestión empíricamente. Y puesto que se trataba de fenómenos improbables, inventó un amplificador de la probabilidad y lo comprobó, primero en el sótano de su casa y luego en un Polígono Dragonífero especial, Dragoligón, costeado por la Academia.' La afirmación en el último párrrafo sobre que los gnómos somos 'termodinámicamente imposibles sólo en el sentido estadístico', te ha dejado bastante confundido y te convence de dejar el libro para una mejor ocasión. o mejor: dani.carbonell@gmail.com Metes _ dentro del cajón del elevador. Está en el interior del cajón del elevador. En la pantalla aparece el siguiente mensaje: Indica GRAFICOS SI para jugar con gráficos, GRAFICOS NO para jugar sin gráficos.\n Fuerzas la vista, pero no consigues distinguir nada en esta penumbra...\n ¡Está demasiado oscuro para hacer nada aquí dentro! Empiezas a asustarte y solo piensas en salir.\n Sales de casa de Agostine...\n ¡Parece que viene alguien!\n ¡Dos elfos! ¡Aquí, en medio de la Gran Ciudad!\n Intentas escabullirte tras la fuente...\n -¡A él!-grita uno de los elfos, el que parece el jefe.\n Intentas huir, pero tus cortas piernas no son rival para el elfo de la corbata...\n -¡¡Noooo!!-gritas mientras el elfo te agarra y te levanta en vilo...\n El elfo te tapa boca y nariz con un pañuelo y te entra una repentina somnolencia...\n Antes de dormirte alcanzas a oír...\n -Señor, lleva el CD.\n -Muy bien, el señor Goldrin estará satisfecho...\n Duermes...\n Eso no puedes meterlo en el ordenador.\n Eso no puedes meterlo en el ordenador.\n Eso no puedes meterlo en el ordenador.\n Mejor por la parte de fuera.\n La caja de cartón no está por aquí.\n No llevas el objeto adecuado.\n Ya lo hiciste.\n Con letras bien gordas escribes en la tapa de la caja: A la atención personal de MR. ELDRAD GOLDRIN, Rochester 960, Gran Ciudad.\n Tan apretado estás que mejor salir primero y sacarlo desde fuera.\n ¡No alcanzas!\n ¡No alcanzas!\n ¡No alcanzas!\n ¡No alcanzas!\n Debes desmontar primero...\n No la llevas contigo.\n Metes la regadera en el cajón del elevador.\n Metes la regadera en el cajón del elevador... tan torpemente que vuelca y se vacía.\n No la llevas contigo.\n No tiene mucho sentido meter cosas ahí dentro, ¿no?\n El aroma es evocador...\n El aroma es evocador...\n No estás especialmente cansado ahora...\n No parece que vayas a ver mucho más subido ahí.\n 'Pepito Grillo Inc'\n El aroma del guiso te hace recordar que no has comido en todo el día...\n No puedes meter cosas dentro de la caja de cerillas, es demasiado pequeña.\n O no está a tu alcance o no se puede mover.\n Está firmemente sujeta a la pared.\n Temes que se ahogaría si lo dejas ahí dentro.\n No se de que estás hablando.\n Primero debes abrirla.\n Primero tendría que estar abierta.\n No quieres dejar nada tuyo en esa caja fuerte, suficiente han robado los elfos a los gnomos a lo largo de los tiempos como para que se queden con algo más.\n Sacas el CD-Rom del interior de la caja fuerte.\n El CD-Rom ya no está en el interior de la caja fuerte.\n No ves eso en el interior de la caja fuerte.\n Con lo que te costó abrirla no parece lo más inteligente cerrarla ahora.\n Por desgracia ya está cerrada.\n La caja fuerte ya está abierta.\n No lo tienes entre manos en este momento...\n Te sientes un poco estúpido mientras te colocas el estetoscopio y lo acercas a la caja fuerte...\n 'No puede ser tan difícil' - piensas, al fin y al cabo lo has visto hacer cientos de veces en las películas.\n Al fin, con la ayuda del estetoscopio consigues la combinación correcta y la caja se abre con un hidráulico PUFFFF.\n Lo intentas, pero no lo consigues. No es tan fácil abrir una caja fuerte sin saber la combinación. ¿Qué objeto podría ayudarte?\n Creo que ni incluso eso le despertaría... lo mejor sería dejarlo descansar.\n Para cargarlo antes tienes que bajar del elevador.\n No tienes sitio para dejarlo en el cajón del elevador, y no quieres soltarlo desde aquí hasta el suelo, podría hacerse daño.\n ¡El elfo te vería!\n No llegaría encendida hasta esa horrible boca.\n ¡No te atreves a acercarte!\n ¡No te atreves a acercarte!\n Ya te deshiciste de él.\n ¡No consigues romperlo! Y encima te ganas un buen dolor de muelas...\n ¿Qué quieres sacar de la caja?\n ¡No quieres dañar el invernadero del Doctor!\n ¡No quieres dañar el invernadero del Doctor!\n ¡No quieres dañar el invernadero del Doctor!\n La puerta está cerrada por el viejo candado, intentas abrirlo con la llave, pero a simple vista ya se puede ver que esa llave no abrirá ese candado.\n Golpeas la puerta, pero asegurada por el candado resiste tus esfuerzos.\n Cuelga a un lado casi cayéndose, mejor no tocarla mucho...\n No creo que nadie acudiera a abrirte.\n Cierras el paraguas antes de entrar a la seta...\n No quieres correr el riesgo de perderlo...\n Así sea pues...\n ¡Diez puntos menos de prestigio aventurero!\n Coger cualquier objeto de este limbo-dónde-todo-lo-que-se-pierde-cae puede que te ayude a terminar la aventura, pero será un borrón en tu historial aventurero. Todo lo que aquí se encuentra puedes conseguirlo de una forma más honrada. ¿No sería mejor pensar un poco cómo conseguir aquello que aquí tienes al alcance de tu mano?\n La caja de cerillas mejor que permanezca cerrada hasta el momento de abrir la cerilla. La gran caja de cartón la abres y cierras según te conviene.\n Cuando quieras encender una cerilla la abrirás. Mientras mejor que permanezca cerrada.\n La caja de cerillas permanece cerrada... ¡para que no se escape ninguna!. La gran caja de cartón la abres y cierras según te conviene.\n La caja de cerillas permanece cerrada... ¡para que no se escape ninguna!\n Pero, si no está aquí.\n Demasiado técnicos para ti.\n ¡Son muy viejos! Y además, demasiado pesados.\n Sin duda demasiado pesado.\n Arrastrar muebles provocaría un ruido enorme que no quieres hacer.\n Arrastrar muebles provocaría un ruido enorme que no quieres hacer.\n Arrastrar muebles provocaría un ruido enorme que no quieres hacer.\n Arrastrar muebles provocaría un ruido enorme que no quieres hacer.\n No alcanzas.\n El elfo la sostiene aún entre sus dedos. Sería peligroso quitársela, quién sabe si despertaría.\n Ahora mismo lo importante es escapar de aquí.\n Son demasiados.\n No tienes.\n Te bebes toda el agua de la regadera de un trago.\n Miras en la regadera, pero está vacía.\n Te bebes toda el agua de la regadera de un trago.\n Miras en la regadera, pero está vacía.\n Así no conseguirás nunca que vuelva a ser amigo tuyo.\n ¡Ja! No podrías enfrentarte a un zorro ni aunque quisieras.\n BM es tu mascota, y le tienes mucho aprecio. ¿Porqué hacer una cosa así?\n El elfo ya está profundamente dormido.\n No se te ocurre como.\n Tendrías que inmovilizarlo durante un tiempo para poder hacerlo... ¡y no veo como!\n El elfo ya está profundamente dormido.\n No se te ocurre como.\n Tendrías que inmovilizarlo durante un tiempo para poder hacerlo... ¡y no veo como!\n Son viejos y pesados, y no te gustan.\n No encentras nada de utilidad. Suerte haber encontrado tus cosas aquí.\n No entiendes nada.\n ¿Siendo tan pequeña e indefensa?\n No dispones ni de hacha, ni tijeras ni sierra, pero aunque los tuvieras... ¡No te atreves a acercarte!\n No dispones ni de hacha, ni tijeras ni sierra, pero aunque los tuvieras... ¡No te atreves a acercarte!\n Hay tantos que necesitarías toda una vida.\n Debes coger primero la caja de cerillas.\n La caja de cerillas está vacía.\n Si quieres encender una cerilla prueba con 'encender cerilla', si no quieres encenderla no te va a servir de nada fuera de la caja.\n Debes coger primero la caja de cerillas.\n La caja de cerillas está vacía.\n Si quieres encender una cerilla prueba con 'encender cerilla', si no quieres encenderla no te va a servir de nada fuera de la caja.\n ¡Necesitas llevarlo contigo!\n No estás en el sitio adecuado.\n Acuestas a Agostine sobre tu catre...\n Lo arropas y en su cara te parece ver una expresión de tranquilidad que no habías visto desde hace años. No hay nada para un gnomo como descansar en un buen hogar gnomo...\n Te sientas en la cama mientras acaricias la cara de Agostine... 'En que lío te has metido Agostine, en que lío te has metido...'\n Poco a poco el cansancio va haciendo mella en ti...\n Te duermes...\n Caes...\n\n Te persigue una planta carnívora...\n\n Y un pirata malcarado...\n\n Y dos autos deportivos...\n\n ¡Y los dos elfos! ¡Están aquí!\n\n ¡Rudolph! ¡Rudolphine!\n\n ¡Rudolphine, despierta dormilón!\n\n -¿Agostine? ¡Agostine!\n -Coge tu martillo Rudolph, ¡no tenemos tiempo que perder!\n clearTextWindow() -¡Eh, eh! Espera un momento Agostine, tienes mucho que explicarme. Primero que nada, aquí tienes, tu CD, ¿puedes decirme en que lío te has metido, y de paso a mi?\n -Esto, si, el cd-rom... bueno, eso no tiene mucha importancia ahora...\n -¿Cómo? ¿Que no tiene importancia? Agostine, he puesto en peligro mi vida para recuperar este CD y ¡¿tu me dices que no tiene importancia?!\n clearTextWindow() -El CD era solo una tapadera Rudolphine... No recordaba lo obtuso de mente que eras...\n -¡Agostine! ¡Te juro que...!\n -Calla Rudolph, y prepárate ¡hemos de salir!\n -No pienso ir a ninguna parte si no me cuentas que pasa Agostine.\n -¡El Doctor Rudolph! ¡No te das cuenta que la clave de todo está en el Doctor! Los elfos lo han secuestrado... creo que se lo han llevado a América. No tenemos tiempo que perder, te lo explicaré por el camino.\n Agostine sale corriendo de la casa y oyes desde fuera:\n -¿Donde has dejado ese maldito paraguas Rudolph?\n clearTextWindow() ¡Por el Gran Zurcidor! Parece que esto no era más que el comienzo de las aventuras de Rudolphine Rur.\n Pero eso será en otra ocasión.\n ¡Muchas gracias por jugar!\n\n ¡Necesitas llevarlo contigo!\n No estás en el sitio adecuado.\n Acuestas a Agostine sobre tu catre...\n Lo arropas y en su cara te parece ver una expresión de tranquilidad que no habías visto desde hace años. No hay nada para un gnomo como descansar en un buen hogar gnomo...\n Te sientas en la cama mientras acaricias la cara de Agostine... 'En que lío te has metido Agostine, en que lío te has metido...'\n Poco a poco el cansancio va haciendo mella en ti...\n Te duermes...\n Caes...\n\n Te persigue una planta carnívora...\n\n Y un pirata malcarado...\n\n Y dos autos deportivos...\n\n ¡Y los dos elfos! ¡Están aquí!\n\n ¡Rudolph! ¡Rudolphine!\n\n ¡Rudolphine, despierta dormilón!\n\n -¿Agostine? ¡Agostine!\n -Coge tu martillo Rudolph, ¡no tenemos tiempo que perder!\n -¡Eh, eh! Espera un momento Agostine, tienes mucho que explicarme. Primero que nada, aquí tienes, tu CD, ¿puedes decirme en que lío te has metido, y de paso a mi?\n -Esto, si, el cd-rom... bueno, eso no tiene mucha importancia ahora...\n -¿Cómo? ¿Que no tiene importancia? Agostine, he puesto en peligro mi vida para recuperar este CD y ¡¿tu me dices que no tiene importancia?!\n -El CD era solo una tapadera Rudolphine... No recordaba lo obtuso de mente que eras...\n -¡Agostine! ¡Te juro que...!\n -Calla Rudolph, y prepárate ¡hemos de salir!\n -No pienso ir a ninguna parte si no me cuentas que pasa Agostine.\n -¡El Doctor Rudolph! ¡No te das cuenta que la clave de todo está en el Doctor! Los elfos lo han secuestrado... creo que se lo han llevado a América. No tenemos tiempo que perder, te lo explicaré por el camino.\n Agostine sale corriendo de la casa y oyes desde fuera:\n -¿Donde has dejado ese maldito paraguas Rudolph?\n ¡Por el Gran Zurcidor! Parece que esto no era más que el comienzo de las aventuras de Rudolphine Rur.\n Pero eso será en otra ocasión.\n ¡Muchas gracias por jugar!\n\n Será mejor que acuestes a Agostine... parece que necesita más de la cama que tú.\n En su estado no estás del todo seguro que realizara el pequeño vuelo hasta el porche de forma correcta. Será mejor que subáis juntos.\n No lo llevas cargado.\n Si consigues despertar a Agostine no piensas volver a salir del Valle en muuuucho tiempo.\n BM se merece un descanso después de cargar con dos pesados gnomos desde la Gran Ciudad humana.\n BM se merece un descanso después de cargar con dos pesados gnomos desde la Gran Ciudad humana.\n No tienes el CD-Rom en tu poder.\n Balanceas el CD delante de la (gran) nariz de Agostine: 'Eh Agostine, lo tengo, lo tengo'... pero es inútil, mientras permanezca en este estado no se dará cuenta.\n ¡No puedes irte sin Agostine!\n ¡No puedes irte sin recuperar el CD!\n 'Ya es hora de que abandonemos esta maldita casa' piensas mientras afianzándote a Agostine en la espalda cruzas la verja...\n Pero ahora, ¿que harás? Tan solo eres un diminuto gnomo perdido en medio del gran mundo humano, cargando con un hermano dormido y con un cd que tan sólo el Zurcidor sabe que contiene...\n Además, aquellos dos no tardarán en despertar... y ¡su ira será terrible!\n Te sientas desanimado en la acera pensando que poder hacer...\n Suspiro...\n Graaan Suspiro...\n ¡Un momento!\n ¿Puede ser? ¿Es posible?\n ¡BM! ¡Tu fiel zorro! Lo acaricias y lo abrazas mientras BM te relame, a ti y a Agostine (no puedes evitar una pizca de envidia cuando compruebas que parece hacer más caso a Agostine que a ti).\n -¡Oh BM! ¿Como has llegado hasta aquí? ¿Nos has seguido?\n BM te mira y te parece notar un extraño poso de inteligencia en el fondo de sus sonrientes ojos. Nunca volverás a dudar del olfato de un zorro nacido en el Valle... ¡ni de su lealtad!\n Montas en BM y con menos dificultades de la previstas acomodas a Agostine en el lomo del zorro.\n -¡Llévanos a casa BM!-exclamas con alegría.\n BM atraviesa raudo la ciudad...\n Sobre su lomo sorteáis las nevadas cumbres de las montañas...\n Y por fin... el Valle. Has conseguido volver a casa con Agostine sano y salvo...\n ¡Sano y salvo y dormido como un tronco!\n Lo mejor será que lo lleves a casa y lo acuestes. Quizá el efecto se le pase pasado un tiempo...\n Desmontas a BM y vuelves a cargar a Agostine sobre tu ya dolorida espalda.\n Con lo que te ha costado encontrarlo no vas a deshacerte de él ahora.\n Aparte de la ya descubierta caja fuerte detrás de los cuadros no encuentras sino polvo.\n Aparte de la ya descubierta caja fuerte detrás de los cuadros no encuentras sino polvo.\n Aparte de la ya descubierta caja fuerte detrás de los cuadros no encuentras sino polvo.\n Tras uno de ellos descubres como habías supuesto una caja fuerte.\n Tras uno de ellos descubres como habías supuesto una caja fuerte.\n Tras uno de ellos descubres como habías supuesto una caja fuerte.\n Temes que el elfo te descubra si te adentras demasiado en la habitación.\n Temes que el elfo te descubra si te adentras demasiado en la habitación.\n Temes que el elfo te descubra si te adentras demasiado en la habitación.\n Temes que si dejas algo el elfo te oiga y se percate de tu presencia. Te estremeces al pensar que harían esta vez contigo si descubren que escapaste del desván.\n Temes que el elfo te descubra si te adentras demasiado en la habitación.\n Creo que no quedarían bien con la decoración de tu hogar.\n Temes que el elfo te descubra si te adentras demasiado en la habitación.\n Para entrar en la estancia contigua tendrías que pasar prácticamente por delante de las narices del elfo...\n Utilizar el ordenador de Agostine ya fue bastante angustioso para ti, no quieres volver a intentarlo.\n No te interesa.\n No puedes acercarte al teléfono mientras el elfo esté aquí.\n Piensas por un momento utilizar el teléfono... Pero en realidad no se te ocurre a quien llamar... Poca gente, por no decir ninguna, tiene teléfono en el Valle.\n Se trata de un fijo, no te servirá de nada por ahí.\n Hay multitud de ellos, no sabrías por donde empezar.\n Hay multitud de ellos, no sabrías por donde empezar.\n Hay multitud de ellos, no sabrías por donde empezar.\n Hay multitud de ellos, no sabrías por donde empezar.\n Demasiado pesada para un gnomo como tu.\n No es una mala idea, pero lo malo es que no la tienes entre manos.\n Respiras hondo y haciendo acopio de valor te acercas sigilosamente al elfo...\n ¡Golpeas furiosamente al elfo en la cabeza con la sartén!\n Por un momento parece que resiste...\n Pero poco a poco cae a tierra desvanecido...\n Necesitarás utilizar algo contundente si quieres dejar fuera de combate a este elfo.\n Ya lo dejaste fuera de combate, ensañarte con él sería como mínimo cruel.\n Mejor lo dejamos dormir un rato.\n Lo mueves un poco, con miedo a que se despierte. Pero no lo hace, le metiste un buen golpe.\n No encuentras nada interesante entre sus ropas.\n Eso sería como acercarte a él y gritar: '¡Eh! ¡Estoy aquí! ¡Me escapé!'\n Tienes ganas de cruzar un par de palabritas con este elfo a propósito de lo que os ha hecho a ti y a tu hermano... pero sabes que no sería muy prudente llamar su atención.\n En su estado ten por seguro que no te responderá.\n Tendrías las de perder...\n Te conformas con haberle dejado grogui.\n ¡Por el Gran Zurcidor! Ese no es tu estilo...\n Tendrías las de perder...\n Te conformas con haberle dejado grogui.\n ¡Por el Gran Zurcidor! Ese no es tu estilo...\n Te descubriría y probablemente te volvieran a encerrar en ese oscuro y desagradable desván.\n En realidad no quieres dañas al viejo mayordomo humano, sabes que él tan sólo cumple órdenes.\n En realidad no quieres dañas al viejo mayordomo humano, sabes que él tan sólo cumple órdenes.\n En realidad no quieres dañas al viejo mayordomo humano, sabes que él tan sólo cumple órdenes.\n En realidad no quieres dañas al viejo mayordomo humano, sabes que él tan sólo cumple órdenes.\n Precisamente lo que deseas es no llamar su atención, no creo que haciendo eso lo consigas.\n ¡No alcanzas!\n ¡No alcanzas la puerta de la trampilla!\n Con Agostine cargado a tus espaldas te resulta imposible subir las escaleras.\n ¡Quema!\n El cocinero está permanentemente pendiente de él. Además, es demasiado grande y pesado para un gnomo como tu.\n Cucharones, espumaderas y demás utensilios culinarios no te ayudarán a salir de aquí.\n ¡Quema!\n El mayordomo te descubriría.\n Está herméticamente cerrado.\n El cocinero la tiene entre manos en estos momentos.\n De forma un poco temeraria saltas junto al fogón, estiras la mano y coges la abollada sartén. ¡El cocinero humano no se ha dado cuenta!\n Temes que en su estado se ahogara por falta de aire en el interior de la caja, mejor no.\n Mejor primero dejas a Agostine en el suelo... ¡No es fácil entrar a una alta caja cargando con un gnomo!\n Lo llamas, 'Agostine, eh! Agostine', pero con la boca y los ojos entreabiertos tan solo consigues que murmulle: 'el cd... no pueden apropiarse de los planos, el proyecto...'\n Lo llamas, lo palmeas, lo sacudes, le gritas al oído, pero al parecer la droga o la magia élfica es demasiado fuerte. Quizá la única forma sea esperar a que pase el efecto.\n No puedes cargar con él, está atado.\n No puedes cargar con él, está atado.\n El elfo sin duda se daría cuenta.\n La derramarías y el elfo seguramente te descubriría.\n ¡Te descubriría!\n Empujas un poco al dormido elfo, pero este no se despierta.\n No llevas a Agostine.\n Dejas a Agostine en el suelo.\n Ya lo estás cargando.\n Agostine no está por aquí.\n Acomodas a Agostine sobre tu espalda... ¡Uf, como pesa!\n Intentas despertar a Agostine, pero este parece demasiado dormido, o drogado, para que tus esfuerzos consigan resultado.\n Insistes: 'Agostine, Agostine!...\n Por fin tu hermano abre un ojo y te mira sin reconocerte: 'El CD... no deben encontrar los planos...'\n Agostine vuelve a caer profundamente dormido.\n Desatas a Agostine, que cae pesadamente al suelo sin despertarse...\n Insistes: 'Agostine, Agostine!...\n Por fin tu hermano abre un ojo y te mira sin reconocerte: 'El CD... no deben encontrar los planos...'\n Agostine vuelve a caer profundamente dormido.\n Intentas despertar a Agostine, pero este parece demasiado dormido, o drogado, para que tus esfuerzos consigan resultado.\n No encuentras nada interesante entre sus ropas, además, no eres un sucio ladrón.\n ¡No! Te volvería a apresar.\n ¡No tienes contigo el pañuelo!\n Te arrastras junto al elfo...\n Por un momento este aparta la vista del libro y mira a su alrededor...\n ¿Te ha oído?\n Parece que no, pues bebe un trago de vino y vuelve a fijar su vista en el libro...\n Aprovechas este momento para introducir el pequeño pañuelo todavía húmedo de cloroformo en la jarra de vino...\n El elfo vuelve a llenar la copa... ¡Descubriendo el pañuelo!\n ¡Pánico!\n El elfo murmura: 'Maldito mayordomo humano.', arroja el pañuelo lejos y apura de un furioso trago la copa de vino...\n Esperas...\n Poco a poco el elfo parece entrar en letargo... finalmente cae al suelo, con la boca y los ojos entreabiertos, pero definitivamente dormido.\n Meter eso en la jarra no parece muy efectivo.\n ¡No tienes contigo el pañuelo!\n Te arrastras junto al elfo...\n Por un momento este aparta la vista del libro y mira a su alrededor...\n ¿Te ha oído?\n Parece que no, pues bebe un trago de vino y vuelve a fijar su vista en el libro...\n Aprovechas este momento para introducir el pequeño pañuelo todavía húmedo de cloroformo en la jarra de vino...\n El elfo vuelve a llenar la copa... ¡Descubriendo el pañuelo!\n ¡Pánico!\n El elfo murmura: 'Maldito mayordomo humano.', arroja el pañuelo lejos y apura de un furioso trago la copa de vino...\n Esperas...\n Poco a poco el elfo parece entrar en letargo... finalmente cae al suelo, con la boca y los ojos entreabiertos, pero definitivamente dormido.\n Meter eso en la jarra no parece muy efectivo.\n Te asomas a su interior, es pequeña, nada más que un par de estantes, y no encuentras nada de interés.\n Reprimes las ganas de golpearlo, porqué aunque concentrado en la lectura, el elfo parece demasiado alerta como para pillarlo por sorpresa.\n No quieres hacer leña del árbol caído. Aunque estás en todo tu derecho. Finalmente tan solo golpeas un poco con el pie al elfo dormido, que protesta tímidamente...\n ¡No quieres que te descubra y te encierre de nuevo en ese horrible desván!\n Te acercas al elfo y le murmuras: '¿Ahora qué?', pero el elfo dormido no parece escucharte.\n No puedes acercarte a él mientras el elfo esté aquí, vigilando.\n No puedes acercarte a él mientras el elfo esté aquí, vigilando.\n Susurras: 'Eh, Agostine', pero tienes miedo de que el elfo te oiga y no dices nada más.\n Eso no parece muy buena idea.\n Abres la puerta y sales al porche...\n Con cuidado de no hacer ruido abres la puerta...\n La puerta ya está abierta.\n La puerta ya está cerrada.\n Cierras la puerta con cuidado de no hacer ruido...\n Coges la caja de cerillas.\n La caja de cartón es muy voluminosa... ahora mismo dentro de una casa ajena (¡donde no eres bienvenido!) es mejor el sigilo y poder esconderte llegado el momento. Cargar con la caja no te ayudaría mucho a ello, mejor la dejamos aquí.\n No hace falta llamar al timbre para que te abran, la puerta está abierta.\n Llamas al timbre... un sordo DONG resuena en el interior de la casa.\n Llamas al timbre... oyes un voz ronca decir: '¡Un momento!\n La penumbra del interior no te deja ver gran cosa.\n Es bonito, pero sería engorroso ir cargado con tantas flores por ahí.\n Golpeas educadamente la puerta, pero no parece ocurrir nada...\n Golpeas educadamente la puerta, pero no parece ocurrir nada...\n Golpeas con el hombro, pero tus esfuerzos son en vano.\n Sin la llave no se puede abrir desde fuera.\n La puerta ya está abierta.\n Desgraciadamente la puerta ya está cerrada.\n Cierras la puerta, y al segundo piensas si no has cometido una tontería... FATAL.\n No llegas a las ventanas del primer piso. La ventana junto a la puerta no se puede abrir, tan solo es el cristal.\n No llegas a las ventanas del primer piso. La ventana junto a la puerta no se puede abrir, tan solo es el cristal.\n Demasiado alta para ti... además, puedes utilizar la puerta.\n No se te ocurre que poner en la caja, ¿una dirección quizá? pero no sabes cuál...\n La caja de cartón no está por aquí.\n No llevas el objeto adecuado.\n Ya lo hiciste.\n Con letras bien gordas escribes en la tapa de la caja: A la atención personal de MR. ELDRAD GOLDRIN, Rochester 960, Gran Ciudad.\n ¿Dónde quieres escribirlo?\n No quieres dejar nada en este buzón.\n El buzón está vacío.\n Está fuertemente soldado a la verja, no podrás arrancarlo.\n Lo abres y te asomas al interior. Está vacío.\n Lo cierras.\n La abres comprobando que no está cerrada con llave y la vuelves a la cerrar para que no llame la atención.\n Compruebas que está cerrada, aunque no con llave.\n ¡Huele aún a cloroformo!\n No tienes más que dejarlo...\n Mejor sal tu primero...\n No puedes entrar dentro de la caja mientras la lleves a cuestas...\n La puerta está cerrada.\n Prueba con METER/SACAR para introducir objetos o sacarlos del interior de la caja.\n Prueba con METER/SACAR para introducir objetos o sacarlos del interior de la caja.\n Prueba con METER/SACAR para introducir objetos o sacarlos del interior de la caja.\n No acabo de ver claro de donde quieres sacar eso.\n ¿Qué quieres sacar de la caja?\n No puedo ver dentro de la caja _.\n Sacas _ de la caja.\n La vela debe permanecer junto al sombrero.\n El sombrero debe permanecer junto a tu cabeza.\n No acabo de ver claro dónde quieres meter eso.\n ¿Qué quieres meter en la caja?\n No llevas _.\n Metes _ en el interior de la caja.\n La abres o la cierras según te conviene...\n La abres o la cierras según te conviene...\n La caja es demasiado grande para voltearla... si quieres vaciarla tendrás que ir sacando los objetos uno por uno.\n ¡Basura de elfos! No te será de mucha ayuda.\n No te fías de las herramientas ajenas... No sabes cuando un martillo ajeno puede golpear un pie propio...\n La puerta del garaje se abre y cierra mediante un mecanismo eléctrico... recuerdas cierta película en la que alguien se moría colgado de un aparato similar, mejor lo dejamos como está.\n La puerta del garaje se abre y cierra mediante un mecanismo eléctrico... recuerdas cierta película en la que alguien se moría colgado de un aparato similar, mejor lo dejamos como está.\n La puerta del garaje se abre y cierra mediante un mecanismo eléctrico... recuerdas cierta película en la que alguien se moría colgado de un aparato similar, mejor lo dejamos como está.\n No será por falta de ganas, no...\n No lo mueves ni un milímetro... Parece que tienen puesto el freno de mano.\n Tanteas tanto uno como otro, pero parecen firmemente cerrados con llave.\n Tanteas tanto uno como otro, pero parecen firmemente cerrados con llave.\n Imposible... Las puertas están cerradas.\n Imposible... las puertas están cerradas.\n Es donde duermen los automóviles de los dueños de la casa...\n Ummm ¿te sientes especialmente nostálgico hoy?\n Visítalo en: www.caad.es\n ¿No se te ocurre una solución menos drástica?\n Te alejas de él.\n Lo haces para asomarte o examinar más de cerca la ventana.\n Una de las ventanas de la planta baja tiene la cortina entreabierta... subiéndote al pequeño escalón contemplas con cuidado el interior...\n ¡Es Agostine! Puedes ver a Agostine atado a una silla...\n ¡No se mueve! ¿Muerto?\n No... ves como respira pesadamente. Parece estar dormido, o drogado.\n Contemplas un desordenado salón, lleno hasta los topes de muebles y trastos. Por precaución no estás mucho tiempo asomado. No sabes cuantos más de estos malvados elfos pueden merodear por aquí.\n Solo alcanzas una... y como todas las demás, parece imposible abrirla desde fuera...\n Tanteas la ventana, empujas, mueves... pero no consigues abrirla desde fuera...\n El cristal es demasiado grueso para que alguien te oiga desde dentro.\n !Es Agostine! Puedes ver a Agostine atado a una silla...\n ¡No se mueve! ¿Muerto?\n No... ves como respira pesadamente. Parece estar dormido, o drogado.\n Contemplas un desordenado salón, lleno hasta los topes de muebles y trastos. Por precaución no estás mucho tiempo asomado. No sabes cuantos más de estos malvados elfos pueden merodear por aquí.\n ¡No alcanzas! Además, están cubiertas por gruesos cortinajes.\n ¡No alcanzas! Además, aunque te parezca raro, abrir una ventana cerrada desde fuera no es tan fácil.\n ¡No alcanzas! Además, aunque te parezca raro, abrir una ventana cerrada desde fuera no es tan fácil.\n No te va a ser de mucha utilidad hacer eso...\n No te va a ser de mucha utilidad hacer eso...\n No te va a ser de mucha utilidad hacer eso...\n No te va a ser de mucha utilidad hacer eso...\n Rebuscas entre ellos, pero no encuentras nada más útil.\n Rebuscas entre ellos, pero no encuentras nada más útil.\n No encuentras nada debajo.\n No tienes jabón en tu poder.\n Frotas la pastilla de jabón contra los barrotes de la ventana, dejándolos cubiertos de una fina película de jabón.\n Frotas la pastilla de jabón contra los barrotes de la ventana, dejándolos cubiertos de una fina película de jabón.\n Frotas la pastilla de jabón contra los barrotes de la ventana, dejándolos cubiertos de una fina película de jabón.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Te enjabonas a conciencia, quedando resbaladizo y lustroso.\n Hueles el polvo y el moho de la estancia.\n La ventana no está cerrada, ya que carece de puerta. Lo que si que tiene son unos fuertes barrotes de hierro.\n La ventana no tiene puerta que se pueda cerrar, tan sólo unos fuertes barrotes que impiden la entrada de intrusos.\n Son fuertes y están firmemente anclados a techo y pared... No los vas a poder mover, cortar, apartar ni limar...\n Intentas hacer pasar tu cuerpo por entre los barrotes, parece que lo vas a conseguir, empujas...\n ¡Te has quedado atascado! ¡Oh! Qué situación más ridícula...\n ¡Empujas! Consigues volver a tu posición original... Ha faltado tan poco para conseguir atravesar los gruesos barrotes.\n Deslizas tu cuerpo entre los enjabonados barrotes... Sí, esta vez mucho mejor...\n ¡Te has quedado atascado!\n Maldices tu gordo cuerpo mientras vuelves a tu posición original... ¡ya casi estabas fuera!\n Deslizas tu enjabonado cuerpo entre los barrotes... ¡Parece que va a funcionar!\n ¡Te has quedado atascado!\n Los gruesos barrotes aún han ofrecido demasiada resistencia a tu correoso y enjabonado cuerpo...\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n Deslizas tu enjabonado cuerpo por entre los enjabonados barrotes...\n ¡Has pasado! ¡Has conseguido salir del desván!\n ¡Oh Oh! Estás colgando de los barrotes a una altura considerable sobre el jardín... ¿Cómo vas a bajar ahora?\n La enjabonada mano no resiste... ¡Caes!\n De forma poco elegante (de culo, vamos) has caído sobre el jardín trasero... Te levantas acariciándote el trasero...\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n Intentas hacer pasar tu cuerpo por entre los barrotes, parece que lo vas a conseguir, empujas...\n ¡Te has quedado atascado! ¡Oh! Qué situación más ridícula...\n ¡Empujas! Consigues volver a tu posición original... Ha faltado tan poco para conseguir atravesar los gruesos barrotes.\n Deslizas tu cuerpo entre los enjabonados barrotes... Sí, esta vez mucho mejor...\n ¡Te has quedado atascado!\n Maldices tu gordo cuerpo mientras vuelves a tu posición original... ¡ya casi estabas fuera!\n Deslizas tu enjabonado cuerpo entre los barrotes... ¡Parece que va a funcionar!\n ¡Te has quedado atascado!\n Los gruesos barrotes aún han ofrecido demasiada resistencia a tu correoso y enjabonado cuerpo...\n Deslizas tu enjabonado cuerpo por entre los enjabonados barrotes...\n ¡Has pasado! ¡Has conseguido salir del desván!\n ¡Oh Oh! Estas colgando de los barrotes a una altura considerable sobre el jardín... ¿Cómo vas a bajar ahora?\n La enjabonada mano no resiste... ¡Caes!\n De forma poco elegante (de culo, vamos) has caído sobre el jardín trasero... Te levantas acariciándote el trasero...\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n Intentas hacer pasar tu cuerpo por entre los barrotes, parece que lo vas a conseguir, empujas...\n ¡Te has quedado atascado! ¡Oh! Qué situación más ridícula...\n ¡Empujas! Consigues volver a tu posición original... Ha faltado tan poco para conseguir atravesar los gruesos barrotes.\n Deslizas tu cuerpo entre los enjabonados barrotes... Sí, esta vez mucho mejor...\n ¡Te has quedado atascado!\n Maldices tu gordo cuerpo mientras vuelves a tu posición original... ¡ya casi estabas fuera!\n Deslizas tu enjabonado cuerpo entre los barrotes... ¡Parece que va a funcionar!\n ¡Te has quedado atascado!\n Los gruesos barrotes aún han ofrecido demasiada resistencia a tu correoso y enjabonado cuerpo...\n Deslizas tu enjabonado cuerpo por entre los enjabonados barrotes...\n ¡Has pasado! ¡Has conseguido salir del desván!\n ¡Oh Oh! Estas colgando de los barrotes a una altura considerable sobre el jardín... ¿Cómo vas a bajar ahora?\n La enjabonada mano no resiste... ¡Caes!\n De forma poco elegante (de culo, vamos) has caído sobre el jardín trasero... Te levantas acariciándote el trasero...\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n ¿Seguro que no has dejado nada interesante en el trastero?\n Intentas hacer pasar tu cuerpo por entre los barrotes, parece que lo vas a conseguir, empujas...\n ¡Te has quedado atascado! ¡Oh! Qué situación más ridícula...\n ¡Empujas! Consigues volver a tu posición original... Ha faltado tan poco para conseguir atravesar los gruesos barrotes.\n Deslizas tu cuerpo entre los enjabonados barrotes... Sí, esta vez mucho mejor...\n ¡Te has quedado atascado!\n Maldices tu gordo cuerpo mientras vuelves a tu posición original... ¡ya casi estabas fuera!\n Deslizas tu enjabonado cuerpo entre los barrotes... ¡Parece que va a funcionar!\n ¡Te has quedado atascado!\n Los gruesos barrotes aún han ofrecido demasiada resistencia a tu correoso y enjabonado cuerpo...\n Deslizas tu enjabonado cuerpo por entre los enjabonados barrotes...\n ¡Has pasado! ¡Has conseguido salir del desván!\n ¡Oh Oh! Estas colgando de los barrotes a una altura considerable sobre el jardín... ¿Cómo vas a bajar ahora?\n La enjabonada mano no resiste... ¡Caes!\n De forma poco elegante (de culo, vamos) has caído sobre el jardín trasero... Te levantas acariciándote el trasero...\n La trampilla, salida natural del trastero está firmemente cerrada... quizá puedas intentar salir por otro lado.\n ¡Pica!\n No les encuentras utilidad... además, mejor buscamos primero la forma de salir de aquí.\n No te sientes especialmente caluroso hoy...\n Tiras de ella, empujas, saltas encima de ella, pero la trampilla no se abre.\n Desgraciadamente la trampilla ya está firmemente cerrada.\n Deberías encender el ordenador primero.\n Tecleas cuidadosamente, pero el ordenador sigue esperando que introduzcas algún soporte.\n Intuitivamente tecleas el nombre de tu hermano...\n La pantalla parpadea un par de veces...\n La pantalla se ha llenado de hileras y hileras de unos y ceros...\n Pasan velozmente, filas y filas... no sabes muy bien que hacer...\n Tras varios segundos la pantalla parece apagarse y aparece el siguiente texto:\n PROYECTO: DECESUS\n SECCIÓN: A. RUR\n FIN DE FICHERO\n ALTO SECRETO\n No sabes muy bien en que se ha metido Agostine... pero todo esto no te huele muy bien...\n Sacas el CD-ROM del ordenador. Mejor será guardarlo en un lugar seguro hasta que encuentres a Agostine.\n En la pantalla aparece: CLAVE INVALIDA\n El CD-ROM no está en el interior del ordenador.\n Sacas el CD-ROM del ordenador.\n El disquette no está en el interior del ordenador.\n Sacas el disquette del ordenador.\n Eso no parece estar en el interior del ordenador.\n Primero debes encender el ordenador.\n Primero debes encender el ordenador.\n Para eso necesitas tenerlo entre manos primero.\n Sacas primero el CD-ROM.\n Introduces el disquette en el ordenador... ¡La pantalla parpadea un momento!\n Aparece un extraño dibujo: EL HOBBIT, y debajo un ¿perro? no, lo que parece quiera ser un dragón...\n Pulsas una tecla y aparece (lentísimamente) un feo dibujo de una puerta y un cofre... y debajo, en ¡inglés! el siguiente texto:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n Siempre habías pensado que Agostine era un poco raro, pero ¿tanto como para esto?\n Introduces el disquette en el ordenador... ¡La pantalla parpadea un momento!\n Aparece un extraño dibujo: EL HOBBIT, y debajo un ¿perro? no, lo que parece quiera ser un dragón...\n Pulsas una tecla y aparece (lentísimamente) un feo dibujo de una puerta y un cofre... y debajo, en ¡inglés! el siguiente texto:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n Thorin.\n Siempre habías pensado que Agostine era un poco raro, pero ¿tanto como para esto?\n Necesitas tenerlo en tu poder antes.\n Primero sacas el disquette...\n Introduces el CD...\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESO:\n Introduces el CD...\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESO:\n Primero debes encender el ordenador.\n Para eso necesitas tenerlo entre manos primero.\n Sacas primero el CD-ROM.\n Introduces el disquette en el ordenador... ¡La pantalla parpadea un momento!\n Aparece un extraño dibujo: EL HOBBIT, y debajo un ¿perro? no, lo que parece quiera ser un dragón...\n Pulsas una tecla y aparece (lentísimamente) un feo dibujo de una puerta y un cofre... y debajo, en ¡inglés! el siguiente texto:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n Siempre habías pensado que Agostine era un poco raro, pero ¿tanto como para esto?\n Introduces el disquette en el ordenador... ¡La pantalla parpadea un momento!\n Aparece un extraño dibujo: EL HOBBIT, y debajo un ¿perro? no, lo que parece quiera ser un dragón...\n Pulsas una tecla y aparece (lentísimamente) un feo dibujo de una puerta y un cofre... y debajo, en ¡inglés! el siguiente texto:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n Thorin.\n Siempre habías pensado que Agostine era un poco raro, pero ¿tanto como para esto?\n Necesitas tenerlo en tu poder antes.\n Primero sacas el disquette...\n Introduces el CD...\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESO:\n Introduces el CD...\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESO:\n El CD-ROM no está en el interior del ordenador.\n Sacas el CD-ROM del ordenador.\n El disquette no está en el interior del ordenador.\n Sacas el disquette del ordenador.\n Eso no parece estar en el interior del ordenador.\n Primero debes encender el ordenador.\n Para eso necesitas tenerlo entre manos primero.\n Sacas primero el CD-ROM.\n Introduces el disquette en el ordenador... ¡La pantalla parpadea un momento!\n Aparece un extraño dibujo: EL HOBBIT, y debajo un ¿perro? no, lo que parece quiera ser un dragón...\n Pulsas una tecla y aparece (lentísimamente) un feo dibujo de una puerta y un cofre... y debajo, en ¡inglés! el siguiente texto:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n Siempre habías pensado que Agostine era un poco raro, pero ¿tanto como para esto?\n Introduces el disquette en el ordenador... ¡La pantalla parpadea un momento!\n Aparece un extraño dibujo: EL HOBBIT, y debajo un ¿perro? no, lo que parece quiera ser un dragón...\n Pulsas una tecla y aparece (lentísimamente) un feo dibujo de una puerta y un cofre... y debajo, en ¡inglés! el siguiente texto:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n Siempre habías pensado que Agostine era un poco raro, pero ¿tanto como para esto?\n Necesitas tenerlo en tu poder antes.\n Primero sacas el disquette...\n Introduces el CD...\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESO:\n Introduces el CD...\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESO:\n ¿Dónde quieres meterlo?\n ¿Dónde quieres meterlo?\n No entiendo dónde quieres introducir el cd.\n No entiendo dónde quieres introducir el disco.\n Ya leíste el contenido del CD... siendo algo tan secreto lo último que quisieras sería meterlo en el ordenador de los elfos.\n No creo que sea el momento de ponerse a jugar ahora.\n Un viejo disco de ordenador en cuya etiqueta puedes leer escrito: The Hobbit.\n Un viejo disco de ordenador.\n No del todo seguro de lo que haces enciendes el ordenador, que ronronea desperezándose y se pone en marcha.\n El ordenador ya está encendido.\n Apagas el ordenador.\n Apagas el ordenador, pero antes sacas el disquette.\n Apagas el ordenador, pero antes sacas el CD-ROM.\n El ordenador ya está apagado.\n Años de experiencia te han enseñado a mantener tus manos alejadas de cualquier objeto de Agostine.\n Años de experiencia te han enseñado a mantener tus manos alejadas de cualquier objeto de Agostine.\n Años de experiencia te han enseñado a mantener tus manos alejadas de cualquier objeto de Agostine.\n Años de experiencia te han enseñado a mantener tus manos alejadas de cualquier objeto de Agostine.\n Es de sobremesa, demasiado pesado y voluminoso para llevarlo por ahí.\n Las diferentes partes del ordenador deben permanecer unidas.\n Las diferentes partes del ordenador deben permanecer unidas.\n Las diferentes partes del ordenador deben permanecer unidas.\n Sería mejor tenerlo entre manos antes.\n Lees los titulares de primer plana:\n MISTERIOSO INGENIERO ANUNCIA DESCUBRIMIENTO CIENTÍFICO DEL SIGLO Empiezas a comprender porqué Agostine guardó este periódico en particular...\n FAMOSO PEDIATRA DE GRAN CIUDAD DESAPARECIDO ¡Por el Gran Zurcidor! Se trata del Doctor...\n MAGNATE ELDRAD GOLDRIN REALIZA OPA HOSTIL SOBRE LABORATORIOS LECKERK No tienes el gusto de conocer al tal Goldrin y ¡poco te interesa!\n La puerta permanece abierta.\n Mejor no, no quieres correr el riesgo de quedarte aquí dentro encerrado.\n No te apetece cargar con un polvoriento felpudo por toda la ciudad.\n Bajo el felpudo solo hay polvo.\n Bajo el felpudo encuentras una nota y mucho polvo.\n Necesitas cogerlo primero.\n '¿Que esperabas encontrar bajo el felpudo? ¿Una llave? A.R.'\n Tu hermano Agostine... siempre tan ingenioso...\n No llegas hasta ellas.\n La cerrada puerta te lo impide.\n Golpeas la puerta educadamente... pero no parece pasar nada.\n Intentas abrir la puerta, pero parece que está atrancada.\n La puerta ya está cerrada.\n Cierras la puerta con precaución, pero no puedes evitar que se vuelva a atrancar.\n Con un fuerte empujón consigues abrir la puerta.\n Con un fuerte golpe consigues abrir la puerta.\n Vale ya, ¿no crees?\n Vale ya, ¿no crees?\n No te fías mucho del agua humana... además, aunque te cueste admitirlo, no llegas hasta el agua de la fuente.\n No te fías mucho del agua humana... además, aunque te cueste admitirlo, no llegas hasta el agua de la fuente.\n Pero si la puerta está abierta...\n La puerta, afortunadamente, ya está abierta.\n La puerta, afortunadamente, ya está abierta.\n Mejor no, no quieres llamar mucho la atención.\n Mejor no, no quieres llamar mucho la atención.\n Mejor no, no quieres llamar mucho la atención.\n El parque no queda tan lejos, puedes ir perfectamente a pie, además, ¿como se sentiría BM?.\n El parque no queda tan lejos, puedes ir perfectamente a pie, además, ¿como se sentiría BM?.\n Puedes cogerTE del semáforo como si de un borracho te trataras. Pero desde luego, no puedes coger el semáforo y llevártelo por ahí.\n Eso no parece una buena idea.\n No veo en que puede ayudar eso a mi o a Agostine.\n No creo que esa sea la mejor forma de pasar desapercibido. Además, en el fondo tu sabes que los humanos... ¡te dan miedo!\n Te alejas de la entrada del Parque y temerariamente trotas hasta la otra acera...\n Te alejas de la entrada del Parque y temerariamente trotas hasta la otra acera...\n Te alejas de la entrada del Parque y temerariamente trotas hasta la otra acera...\n Resoplas un par de veces y te lanzas a la calle para cruzarla...\n MOOOCCC!!! ¡Un automóvil te esquiva con dificultades! Frenazos, bocinas... vuelves asustado a este lado de la calle. No es esta la mejor forma de no llamar mucho la atención Rudolph.\n Ahora que los automóviles están detenidos cruzas la calle sin mayores dificultades.\n Resoplas un par de veces y te lanzas a la calle para cruzarla...\n MOOOCCC!!! ¡Un automóvil te esquiva con dificultades! Frenazos, bocinas... vuelves asustado a este lado de la calle. No es esta la mejor forma de no llamar mucho la atención Rudolph.\n Ahora que los automóviles están detenidos cruzas la calle sin mayores dificultades.\n Pulsas el botón...\n Ten un poco de paciencia... el semáforo cambiará.\n No pierdas el tiempo con el botón, ahora puedes cruzar.\n Sería más correcto pulsarlo.\n Pulse para cruzar.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n No tienes tiempo de visitar la ciudad mientras Agostine está en peligro.\n Desmontas a BM y palmeándole el lomo le susurras al oído: 'BM será mejor que tu esperes aquí.' BM te mira con ojos inteligentes y por un momento te parece que asiente.\n Te adentras en la ciudad...\n BM aparece trotando y penetra contigo en el interior del Valle...\n ¿Quién roba a un ladrón tiene cien años de perdón? No lo has creído nunca. No te parece justo cargar con los objetos de cientos de aventureros. El extraño tridente bastará.\n La puerta ya está abierta.\n Intentas abrir la atrancada puerta...\n ¡La puerta se abre y del interior de la casa caen cientos de objetos!\n Entre los cientos de objetos que caen puedes ver _.\n Lo cierto es que la puerta está cerrada.\n Hay tantos objetos dentro de la casa y cayendo por entre el marco de la puerta que prácticamente te resulta imposible volver a cerrar esta.\n La puerta está cerrada.\n La casa está atestada de objetos que te impiden el paso... No sabes como nadie podía vivir aquí.\n ¡Demasiado grande, pesada y inútil como para hacerlo!\n ¡Demasiado grande, pesada y inútil como para hacerlo!\n ¡Estás en un laberinto! ¡Y no digas que no te lo advertí! Puedes mapearlo con el viejo truco de ir dejando objetos, para ver si has cambiado o no de localidad. ¡Ánimo! No es muy difícil.\n ¡Estás en un laberinto! ¡Y no digas que no te lo advertí! Puedes mapearlo con el viejo truco de ir dejando objetos, para ver si has cambiado o no de localidad. ¡Ánimo! No es muy difícil.\n No vas a encontrar nada interesante en el interior de la caseta de BM, desde aquí se ve que está vacía.\n Eres claramente incapaz.\n Antes debes bajar del cajón del elevador.\n Antes debes bajar del cajón del elevador.\n Antes debes bajar del cajón del elevador.\n Antes debes bajar del cajón del elevador.\n ¡Uff! La piedra es demasiado pesada para ir por ahí cargando con ella. La dejas caer en el suelo...\n ¡Uff! La piedra es demasiado pesada para ir por ahí cargando con ella. La dejas caer en el suelo...\n ¡Uff! La piedra es demasiado pesada para ir por ahí cargando con ella. La dejas caer en el suelo...\n ¡Uff! La piedra es demasiado pesada para ir por ahí cargando con ella. La dejas caer en el suelo...\n Primero desmontas de BM.\n Primero desmontas de BM.\n Primero desmontas de BM.\n Primero desmontas de BM.\n Aunque de fina inteligencia, la conversación no es el fuerte de BM. Le susurras palabras de afecto y ánimo al oído, que te agradece con un lengüetazo.\n Acaricias a BM que se muestra agradecido.\n Ya estás sobre BM.\n Primero debes bajar del cajón del elevador.\n Ya estás sobre BM.\n Primero debes bajar del cajón del elevador.\n Con un grácil (ejem) salto montas sobre el lomo de BM.\n Con un grácil (ejem) salto montas sobre el lomo de BM.\n Con un grácil (ejem) salto montas sobre el lomo de BM.\n Desmontas.\n Desmontas.\n Desmontas.\n Con una mirada fiera y mostrando los dientes un momento BM te disuade de intentar razonar con él.\n BM acepta a regañadientes una caricia, pero no te perdona.\n Desde la marcha de tu hermano Agostine, BM no te deja montarlo, creyéndote responsable de esta.\n Necesitarías tenerla entre manos primero.\n ¡No comprarás la fidelidad de BM tan fácilmente!\n No puedes obligar a BM a beber el elixir directamente desde el frasco.\n BM olfatea la salchicha, te mira entre la indignación y la desconfianza...\n Pero su instinto es demasiado poderoso y acaba comiéndola...\n Cómo por arte de magia (ejem, es magia vamos) una luz brilla en los ojos de BM, que se te acerca y relame. BM ha olvidado la marcha de Agostine y tu 'parte' en todo el asunto y vuelve a ser tu amigo.\n BM lo husmea sin mucho interés.\n Necesitas tenerlo entre manos.\n ¡No tienes el frasco!\n No ves la salchicha por aquí.\n Primero tienes que abrirlo.\n Vacías el contenido del frasco sobre la salchicha.\n ¡Con un leve destello el frasco desaparece!\n ¡No tienes el frasco!\n No ves la salchicha por aquí.\n Primero tienes que abrirlo.\n Vacías el contenido del frasco sobre la salchicha.\n ¡Con un leve destello el frasco desaparece!\n ¡No tienes el frasco!\n No ves la salchicha por aquí.\n Primero tienes que abrirlo.\n Vacías el contenido del frasco sobre la salchicha.\n ¡Con un leve destello el frasco desaparece!\n ¡No tienes el frasco!\n No ves la salchicha por aquí.\n Primero tienes que abrirlo.\n Vacías el contenido del frasco sobre la salchicha.\n ¡Con un leve destello el frasco desaparece!\n Eso no parece muy efectivo.\n Eso no parece muy efectivo.\n Demasiado grande para llevarlo por ahí.\n Olfateas la flor y tus ojos comienzan a cerrarse...\n Cabeceas y recuperas la compostura.\n Aunque tiene un aspecto realmente tentador no tienes mucha hambre en este momento.\n La salchicha está recubierta por el elixir para olvidar... ¿y no quieres olvidar nada, verdad?\n Demasiado picante.\n Arghhh!\n Ayudan a dormir a Rosi, no quieres molestarla.\n Ya cogiste una, creo que es suficiente.\n Es muy peligroso despertar a una ninfa de su hibernación. Eso le podría provocar la muerte... o algo peor.\n Una ninfa dormida constituye un peso muerto que ningún gnomo podría soportar.\n No puedes evitar susurrarle al oído 'Roooo!' pero muy bajito, temiendo despertarla.\n Tu nariz se pone si cabe más roja mientras le das un pequeño beso en la mejilla a tu fiel amiga.\n ¿Con qué clase de persona estoy tratando?\n Eso la despertaría... cosa que no queremos hacer, ¿verdad?\n Mejor los dejas donde están. Rosi podría despertar de repente y necesitarlos.\n Es una foto dedicada del Doctor para Rosi... seguro que le tiene mucho cariño. Mejor dejarla donde está.\n El aroma de las flores secas invitan al descanso...\n ¡No! No es el momento.\n Te agachas para abrir el curioso cofre...\n GUAAU!!! ¡El cofre se levanta de un salto! Observas pasmado como el cofre se pone a corretear a tu alrededor ladrándote.\n El cofre se pone a ladrar escandalosamente y desistes en tu intento.\n Te agachas para coger el curioso cofre...\n GUAAU!!! ¡El cofre se levanta de un salto! Observas pasmado como el cofre se pone a corretear a tu alrededor ladrándote.\n Seguro que no quieres hacerle eso a la mascota de tu amiga Rosi.\n El cofre te mira un momento expectante y casi te parece verlo mover una cola de la que carece... Pero al momento vuelve a corretear, saltar y ladrar.\n Acaricias torpemente el cofre imaginando que tesoros guardará en su interior.\n Acaricias al perro... digo! al cofre. Este ronronea (¿cómo un gato ahora?), y deja de correr y saltar. Aumentas la intensidad de tu caricia y el cofre se acuesta en el suelo cayendo cada vez más en un agradable sopor... Antes de caer dormido del todo el cofre abre su ¿tapa? ¿boca? y de su interior cae un extraño frasco.\n Acaricias al perro... digo! al cofre. Este ronronea (¿cómo un gato ahora?), y deja de correr y saltar. Aumentas la intensidad de tu caricia y el cofre se acuesta en el suelo cayendo cada vez más en un agradable sopor...\n Corretea a tu alrededor y no se deja coger.\n Primero necesitas abrirlo.\n No dirías eso si pudieras oír sus ladridos.\n El cofre husmea la pimienta... y ¡estornuda!\n El cofre husmea lo que le ofreces, pero no parece muy interesado.\n Me temo que no lo llevas contigo.\n ¿Un gnomo soltero y una ninfa dormida en una habitación cerrada? ¿Qué pensarían los vecinos?\n La puerta ya está abierta.\n La puerta está cerrada.\n Aunque parece increíble que tu cuerpo quepa por tan diminuta puerta, logras penetrar en el interior de la seta...\n La puerta ya está abierta.\n La puerta ya está cerrada.\n La puerta está cerrada con llave.\n Utilizas la pequeña llave y con un suave chasquido la puerta se abre.\n Cierras la puerta.\n Necesitarías la llave para cerrar la puerta convenientemente.\n Llamas cortésmente a la puerta... pero no ocurre nada.\n Un sordo DOONGG! resuena en el bosque. Te parece oír un ladrido apagado en el interior de la seta. Esperas... pero no ocurre nada más.\n Un sordo DOONGG! resuena en el bosque. Te parece oír un ladrido apagado en el interior de la seta. Esperas... pero no ocurre nada más.\n Un sordo DOONGG! resuena en el bosque. Te parece oír un ladrido apagado en el interior de la seta. Esperas... pero no ocurre nada más.\n Está firmemente anclada a la seta.\n Está firmemente anclada al suelo. Además, es demasiado grande para ti.\n ¡Vándalo! ¿Aún no has comprendido que la seta es una vivienda?\n ¡Vándalo! ¿Aún no has comprendido que la seta es una vivienda?\n Por sus colores chillones me jugaría el sombrero que se trata de una variedad venenosa de hongo.\n Las hay a millares, aquí y en todo el bosque... pero no te hacen mucha falta.\n Hablar a las plantas es sin duda una buena forma de ayudarlas a crecer... pero estos árboles pudieron dar sombra a tu bisabuelo... Sin duda no te harían más caso que a cualquiera de los cientos de seres que han visto crecer y morir sin gloria ninguna.\n Los viejos árboles hablan entre ellos en su pausado idioma...\n Tu abuelo te enseño a escuchar a los árboles... te parece distinguir historias sobre viejos pastores de árboles y bosques enteros que caminaban a la batalla contra un malvado mago...\n ¡Sin duda estos árboles chochean!\n La plantita te mira implorante y no eres capaz.\n Te aseguro que en un combate a muerte TU tendrías todas las de perder.\n Fue mucho más divertido el episodio de la pimienta...\n ¡Bah! No te apetece nada abandonar el Valle ahora mismo... ¿Que se te ha perdido en el mundo humano?\n El camino es demasiado largo para recorrerlo a pie.\n La planta te mira un momento indignada... pero un fuerte estornudo hace que vuelva a zambullirse en el lago.\n Mejor la dejas en paz ya.\n No quieres dañar a la indefensa plantita.\n Necesitas tenerlo entre manos para poderlo lanzar.\n ¿Qué quieres lanzarle a la planta?\n No llegaría encendida hasta esa horrible boca.\n Lanzas con rabia la pimienta contra la planta...\n ¡La planta engulle la pimienta con avidez!\n Achís!!!!!!!\n ¡La planta estornuda!\n Achísss Achísss Achísss\n La planta no puede dejar de estornudar... Ruge y salta de un lado a otro del invernadero...\n Finalmente, de un salto atraviesa (destrozándolas) las acristaladas paredes del invernadero y se aleja saltando (¡maceta y todo!) por el bosque...\n Aún oyes un lejano Achís!!!\n ¡Cuidado! Algún que otro trozo de cristal ha caído al suelo...\n !No quieres deshacerte de la vela¡\n !No quieres deshacerte de tu sombrero¡\n Lanzas con rabia _ contra la planta...\n ¡La planta engulle _ con avidez!\n Pero tras unos segundos lo escupe con fuerza contra el suelo mientras ríe todavía más fuerte.\n ¿Contra qué o quién quieres lanzar eso?\n Enloquecida por el hambre la planta no parece escucharte...\n ÑAM ÑAM ÑAM\n Estás demasiado lejos y ¡no piensas acercarte más!\n ¿No te parece que ya la regaste lo suficiente?\n ¿No te parece que ya has regado lo suficiente?\n Por nada del mundo quisieras ponerte al alcance de la planta carnívora...\n ¡No te atreves a acercarte!\n Por nada del mundo quisieras ponerte al alcance de la planta carnívora...\n ¡No te atreves a acercarte!\n No llevas contigo el objeto adecuado.\n La regadera está vacía.\n Vacías el contenido de la regadera sobre la plantita... Esta ronronea y se mueve agradecida bajo la inesperada lluvia...\n Algo raro está pasando con la plantita... Se mueve de forma grotesca y se ríe...\n ¡Por el Gran Zurcidor! ¡La plantita está creciendo de forma espectacular!\n La anteriormente graciosa e indefensa plantita se ha convertido en una enorme planta carnívora de grandes fauces que mueve sus raíces cortando el aire mientras ríe escandalosamente... Sus fauces intentan atraparte de un bocado, pero consigues justo a tiempo dar un paso atrás logrando ponerte fuera de su alcance.\n No llevas contigo el objeto adecuado.\n La regadera está vacía.\n Vacías el contenido de la regadera sobre la plantita... Esta ronronea y se mueve agradecida bajo la inesperada lluvia...\n Algo raro está pasando con la plantita... Se mueve de forma grotesca y se ríe...\n ¡Por el Gran Zurcidor! ¡La plantita está creciendo de forma espectacular!\n La anteriormente graciosa e indefensa plantita se ha convertido en una enorme planta carnívora de grandes fauces que mueve sus raíces cortando el aire mientras ríe escandalosamente... Sus fauces intentan atraparte de un bocado, pero consigues justo a tiempo dar un paso atrás logrando ponerte fuera de su alcance.\n ¡La plantita sólo quiere agua!\n Llorando la plantita se aferra a su maceta con todas sus fuerzas y no te ves capaz de alejarla de ella.\n La plantita te mira con ojillos enrojecidos y sigue susurrando 'Agua... Agua...'\n ¿Resistiría fuera del invernadero?\n ¿Resistiría la plantita fuera del invernadero?\n La plantita susurra 'Agua... Agua...' con voz ronca...\n Necesitas tener la regadera contigo.\n Debes desmontar primero.\n Acercas la regadera a la orilla del lago y la llenas con agua... pero poco a poco el agua se pierde por el pequeño orificio que tiene la regadera, quedando esta otra vez vacía.\n Ya llevas la regadera llena, no cabe más agua.\n Acercas la regadera a la orilla del lago y la llenas con agua...\n Necesitas tener la regadera contigo.\n La regadera ya está vacía.\n Viertes el agua de la regadera, vaciándola.\n Primero desmontas...\n Te acercas con cuidado a la orilla del lago y con las manos recoges un poco de agua que bebes rápidamente. Brrrr!! ¡que fría!\n Nooo! Hace demasiado frío. Pulmonía segura.\n El agua que cae provoca un agradable murmullo hipnótico.\n El frasco ya está lleno de un extraño líquido...\n El aroma es evocador...\n El aroma es evocador...\n Necesitas tenerlo todo contigo.\n Necesitas tenerlo todo contigo.\n Ummm... ¿quién quisiera beber un elixir desde una regadera?\n Necesitas tenerlo todo contigo.\n Necesitas tenerlo todo contigo.\n Ummm... ¿quién quisiera beber un elixir desde una regadera?\n Necesitas tener la regadera contigo.\n No ves una fuente de agua por aquí donde puedas llenar la regadera.\n ¡La vela debe permaneces junto a tu sombrero!\n La vela es demasiado ancha para el orificio de la regadera.\n La vela es demasiado ancha para el orificio de la regadera.\n Necesitas tener la regadera contigo.\n Ya taponaste el agujero de la regadera.\n No tienes el objeto adecuado.\n Tanteas el agujero de la regadera y con el tapón de corcho consigues taparlo. Ahora está lista para poder usarla.\n Necesitas tener la regadera contigo.\n Ya taponaste el agujero de la regadera.\n No tienes el objeto adecuado.\n Tanteas el agujero de la regadera y con el tapón de corcho consigues taparlo. Ahora está lista para poder usarla.\n Necesitas tener la regadera contigo.\n Ya taponaste el agujero de la regadera.\n No tienes el objeto adecuado.\n Tanteas el agujero de la regadera y con el tapón de corcho consigues taparlo. Ahora está lista para poder usarla.\n Necesitas tener la regadera contigo.\n Ya taponaste el agujero de la regadera.\n No tienes el objeto adecuado.\n Tanteas el agujero de la regadera y con el tapón de corcho consigues taparlo. Ahora está lista para poder usarla.\n Después de lo que te costó repararla no quieres estropear de nuevo la regadera.\n Después de lo que te costó repararla no quieres estropear de nuevo la regadera.\n No lo tienes contigo.\n No estás muy seguro de querer olvidar algo...\n No estás muy seguro de querer olvidar algo... \n No entiendo el objetivo de vaciar el frasco sobre eso.\n Necesitas tenerlo contigo.\n Necesitas destaparlo primero.\n Vacías el frasco en el suelo... se forma un pequeño charco azulado que rápidamente se evapora, dejando en el lugar un extraño aroma evocador...\n ¡Cómo por arte de magia el frasco parpadea y desaparece!\n Algo te dice que acabas de cometer un error... FATAL.\n Necesitas tenerlo contigo. El frasco ya está abierto.\n Quitas el tapón al frasco y un aroma azulado te envuelve agitando tus recuerdos...\n Necesitas tenerlo contigo.\n No llevas el objeto adecuado.\n El frasco ya está cerrado.\n Empujas el tapón por el borde del frasco, dejándolo herméticamente cerrado.\n Necesitas tenerlo contigo. El frasco ya está abierto.\n Quitas el tapón al frasco y un aroma azulado te envuelve agitando tus recuerdos...\n Necesitas tenerlo contigo.\n El frasco ya está cerrado.\n No llevas el objeto adecuado.\n Empujas el tapón por el borde del frasco, dejándolo herméticamente cerrado.\n No pronunciarás el nombre del creador en vano...\n https://wiki.caad.es/Dwalin\n No está muy clavado en el suelo... pero, ¿que harías después cargado con un buzón por ahí?\n Las piedras delimitan las sendas, no quieres estropear un elemento público.\n No lo abarcas con tus pequeños brazos. Además, está firmemente arraigado en el suelo.\n Extraño pensamiento... no se te ocurre cómo.\n Extraño pensamiento... no se te ocurre cómo.\n Lo intentas una y otra vez, pero el candado estará viejo y oxidado, pero también obstinadamente cerrado.\n Ya te deshiciste de él.\n Ya te deshiciste de él.\n Intentas usar la misteriosa llave con el candado, pero a simple vista ya se puede ver que esa llave no abrirá este candado.\n Quizá sí... si tuvieras la llave...\n Lo intentas una y otra vez, pero el candado estará viejo y oxidado, pero también obstinadamente cerrado.\n Ya te deshiciste de él.\n Buena idea sería tener el martillo contigo para hacer esto. Con certero golpe de martillo arrancas el viejo candado de la puerta... esta, carcomida por los años y la soledad se abre apenas quedando sostenida por uno de sus goznes...\n Eso no parece muy efectivo.\n Te dejas llevar por la frustración y golpeas el candado con el puño... y no consigues más que llevarte un buen moratón en el dorso de la mano.\n Más cerrada no puede estar.\n Para tu desgracia, más cerrado no puede estar.\n Mucho me temo que tu acción lo dejó irremediablemente inservible.\n La cerrada puerta te lo impide.\n La puerta está cerrado por el viejo candado, aunque lo intentas varias veces no lo consigues.\n Ya la abriste. Tu violencia anterior ha dejado la puerta casi prácticamente inservible... mejor dejarla tal cual.\n Pronto desechas la idea... la cuerdecilla parece bastante ignífuga.\n Necesitas tenerla entre manos.\n Necesitas tenerlo entre manos.\n La carta no va dirigida a ti... sería un delito abrirla.\n ¡Ya estaba abierto! ¡El cartero se acordará de esto!\n Necesitas tenerla entre manos.\n Necesitas tenerlo entre manos.\n Ummm. No es una carta dirigida a ti. Se trataría de un delito...\n No puedes resistir la tentación de observar el sobre a contraluz...\n Puedes leer un pequeño fragmento: 'Adjunto participación en beneficios por derechos de imagen en Misterio en la catedral...' ya no puedes leer nada más.\n ESTOY EN UN GRAVE APRIETO. STOP. NECESITO TU AYUDA. STOP. ACUDE CUANDO PUEDAS. AGOSTINE\n ¡Por el Gran Zurcidor! ¡Parece que tu hermano Agostine se encuentra en apuros! Lo mejor será que acudas a su casa en la Gran Ciudad para ver que ha ocurrido...\n Difícilmente podrás mientras el buzón permanezca cerrado.\n Difícilmente podrás mientras el buzón permanezca cerrado.\n Difícilmente podrás mientras el buzón permanezca cerrado.\n Difícilmente podrás mientras el buzón permanezca cerrado.\n Para preservar la salud mental del programador, si deseas coger o dejar algo del interior del buzón utiliza SACAR o METER.\n Para preservar la salud mental del programador, si deseas coger o dejar algo del interior del buzón utiliza SACAR o METER.\n Alargando la mano sacas la carta del interior del buzón.\n Alargando la mano sacas el telegrama del interior del buzón.\n Eso no está en el interior del buzón.\n Metes la carta en el interior del buzón. Quizá el cartero la recoja y la lleve a su verdadero destino.\n Metes el telegrama en el interior del buzón.\n Recuerdas con una sonrisa el día que metiste un ratón en el interior del buzón a la gamberra edad de 55 años. Menudo salto dio el cartero. Y tremendo rapapolvo que te llevaste de tu padre. Mejor no meter cosas raras en el interior del buzón.\n La violencia no es la solución... por lo menos a este problema... Ya cortaste. Buena idea... pero no puedes cortarlo a mordiscos... Manejas con destreza el cristal y cual Alejandro Magno resolviendo el problema del nudo gordiano cortas el ídem y consigues abrir el buzón. Pedazo de nudo, pequeño y fuerte. No lo consigues. Quizá si no te comieras las uñas... Ya abriste el buzón.\n Intentas abrir el buzón, pero no consigues desatar el nudo de la cuerdecilla que sostiene la tapa. ¡Menudo nudo! Cuando más fuerza haces más lo aprietas.\n Más cerrado no puede estar.\n Sin la cuerdecilla intentas sostener verticalmente la tapa del buzón, pero se cae una y otra vez... Tal vez finalmente el cartero se preste a venderte uno de sus buzones ultra-modernos.\n ¡¡No quiero cargármelo!!\n No dudo de que podrías hacer eso, pero, ¿que harías después cargado con un buzón? Dentro del cajón no hay ninguna piedra.\n Coges la pesada piedra.\n Coges la pesada piedra.\n Coges _.\n Sacas la piedra del cajón del elevador. El muelle, ya sin el peso de la piedra salta violentamente. Con una curiosa y calculada parábola, el elevador lanza _ hasta el porche de tu casa. No ves _ dentro del cajón.\n Sacas _ del interior del cajón.\n El cajón no contiene eso.\n Sueltas la piedra en el suelo...\n El muelle, ya sin el peso de la piedra sobre él, recupera su posición original... lanzándote por los aires. De forma poco elegante pero efectiva te ves catapultado hasta el porche de tu casa...\n Aquello que habías dejado dentro del cajón te acompaña en tu vuelo... Sueltas la piedra en el suelo...\n El muelle, ya sin el peso de la piedra sobre él, recupera su posición original... lanzándote por los aires. De forma poco elegante pero efectiva te ves catapultado hasta el porche de tu casa... Aquello que habías dejado dentro del cajón te acompaña en tu vuelo... Ya estás dentro del cajón del elevador.\n Ya estás dentro del cajón del elevador.\n Ya estás dentro del cajón del elevador.\n Con un ligero saltito te bajas del cajón del elevador.\n Con un ligero saltito te bajas del cajón del elevador.\n El muelle, ya sin el peso de la piedra sobre él, salta violentamente... Con una curiosa y calculada parábola, el elevador lanza _ hasta el porche de tu casa. Con un ligero saltito te bajas del cajón del elevador.\n El muelle, ya sin el peso de la piedra sobre él, salta violentamente... Con una curiosa y calculada parábola, el elevador lanza _ hasta el porche de tu casa. No estás subido encima del cajón del elevador.\n No estás subido encima del cajón del elevador.\n Subes al cajón del elevador. Subes al cajón del elevador. Metes la piedra en el interior del cajón.\n De puntillas y realizando un gran esfuerzo consigues elevar la piedra hasta la altura del cajón del elevador y meterla dentro de él. Poco a poco, el muelle va cediendo bajo el peso de la piedra, hasta dejar el cajón tan solo un par de palmos por encima del suelo. Elevas la piedra hasta la altura del cajón del elevador y la metes dentro de él. Poco a poco, el muelle va cediendo bajo el peso de la piedra, hasta dejar el cajón tan solo un par de palmos por encima del suelo. ¿Qué quieres meter dentro del cajón? No tienes entre manos el objeto al que te estás refiriendo. El cajón está demasiado alto... no alcanzas. El cajón está demasiado alto... no alcanzas. Si quieres dejar algo o coger algo del cajón del elevador utiliza METER o SACAR ;) Si quieres dejar algo o coger algo del cajón del elevador utiliza METER o SACAR ;) Si quieres dejar algo o coger algo del cajón del elevador utiliza METER o SACAR ;) Intentas trepar al árbol, pero este está cubierto de húmeda vegetación que hace la idea de trepar a este una misión casi imposible... Además, al contrario que muchos gnomos nunca has sido muy bueno trepando. El árbol está cubierto de húmeda vegetación que hace la idea de trepar a este una misión casi imposible... Además, al contrario que muchos gnomos nunca has sido muy bueno trepando. El árbol está cubierto de húmeda vegetación que hace la idea de trepar a este una misión casi imposible... Además, al contrario que muchos gnomos nunca has sido muy bueno trepando. Demasiado alto. Demasiado alto. Demasiado grande. Demasiado grandes. Miras pícaramente al banco... Pero recuerdas la terrible tortícolis con la que te levantaste de tu última siesta en el banco. No puedes descender por el tronco del árbol, la plataforma, saliente por todas partes, no te deja acercarte a él. Observas con precaución la altura entre la plataforma y el suelo... Nunca has sido bueno para medir distancias a ojo... pero te jugarías los dos que es una distancia demasiado grande para bajar de un salto. Te asomas con decisión al borde la plataforma... Aferrándote con fuerza al paraguas saltas al vacío... El paraguas actúa cual paracaídas, evitándote una caída fatal... Aterrizas limpiamente sobre el suelo. Te asomas con decisión al borde de la plataforma... Y decides que sería casi un suicidio... Los gnomos podemos ser temerarios... pero no suicidas. Te asomas con decisión al borde la plataforma... Aferrándote con fuerza al paraguas saltas al vacío... El paraguas actúa cual paracaídas, evitándote una caída fatal... Aterrizas limpiamente sobre el suelo. Te asomas con decisión al borde de la plataforma... Y decides que sería casi un suicidio... Los gnomos podemos ser temerarios... pero no suicidas. Te asomas con decisión al borde la plataforma... Aferrándote con fuerza al paraguas saltas al vacío... El paraguas actúa cual paracaídas, evitándote una caída fatal... Aterrizas limpiamente sobre el suelo. Te asomas con decisión al borde de la plataforma... Y decides que sería casi un suicidio... Los gnomos podemos ser temerarios... pero no suicidas. Te asomas con decisión al borde la plataforma... Aferrándote con fuerza al paraguas saltas al vacío... El paraguas actúa cual paracaídas, evitándote una caída fatal... Aterrizas limpiamente sobre el suelo. Te asomas con decisión al borde de la plataforma... Y decides que sería casi un suicidio... Los gnomos podemos ser temerarios... pero no suicidas. Te asomas con decisión al borde la plataforma... Aferrándote con fuerza al paraguas saltas al vacío... El paraguas actúa cual paracaídas, evitándote una caída fatal... Aterrizas limpiamente sobre el suelo. Te asomas con decisión al borde de la plataforma... Y decides que sería casi un suicidio... Los gnomos podemos ser temerarios... pero no suicidas. Saltas repetidamente sobre ti mismo, pero te sientes un poco raro... Necesitas tenerlo en tu poder. Necesitas tenerlo en tu poder. Abres el paraguas. El paraguas ya está abierto. Con un ligero PLOFF cierras el paraguas. El paraguas ya está cerrado. La vela ya está apagada. Apagas la vela con los dedos.\n Apagas la vela con los dedos. La vela ya está encendida. No tienes el objeto adecuado. No tienes el objeto adecuado. Con la cerilla enciendes la vela. Debes encender una cerilla antes.\n Debes encender una cerilla antes.\n Sueltas la cerilla, que cae al suelo casi consumida y se apaga. Sueltas la cerilla, que cae al suelo casi consumida y se apaga. Mejor de una en una... Con un breve soplido apagas la cerilla. No tienes ninguna cerilla. No tienes ninguna cerilla. No tienes ninguna cerilla. No tienes ninguna cerilla. No ves ninguna cerilla encendida por aquí. No ves ninguna cerilla encendida por aquí. No tienes la caja de cerillas en tu poder. Ya no quedan más cerillas en la caja. La caja de cerillas ya está vacía.\n No te serviría de nada una caja de cerillas vacía.\n Por favor, especifica si quieres vaciar la caja de cartón o la caja de cerillas.\n La caja de cartón es demasiado grande para voltearla... si quieres vaciarla deberás sacar los objetos que contenga uno a uno.\n No te serviría de nada una caja de cerillas vacía.\n Ya está vacía.\n La caja de cerillas está vacía.\n No necesitas sacarla si no quieres encenderla.\n Con esta termina la caja, me pregunto si has sido todo lo prudente que deberías...\n Hábilmente enciendes una cerilla. No tienes ni leña... ni frío, así que no parece muy buena idea. Esperas... La ventana está construida para dejar pasar la luz, no para abrirse o cerrarse. Herméticamente cerrada. La puerta ya está abierta. La puerta ya está abierta. Te jactas continuamente de que al vivir en la copa de un árbol no necesitas proteger tu hogar cerrando la puerta, no es momento de cambiar de opinión ahora. Te jactas continuamente de que al vivir en la copa de un árbol no necesitas proteger tu hogar cerrando la puerta, no es momento de cambiar de opinión ahora. ¡No te los puedes llevar todos! Vas cómodamente vestido ya, no te hace falta más ropa. Levantarías demasiado polvo, mejor lo dejamos donde está. Levantarías demasiado polvo, mejor lo dejamos donde está. En realidad no te serían de mucha utilidad, mejor no preocuparse por ellos. ¡No quieres romper los marcos! Grande y pesado, lo intentas agarrar, pero pronto compruebas que no es buena idea. No te van a hacer mucha falta por ahí. ¡Está pegada a la pared! Te sientes un poco estúpido tratando de conversar con una termita.\n La aplastas inmisericorde. Creía de verdad que eras mejor persona.\n ¿No te remuerde la conciencia pensando en lo que hiciste?\n 'She's quiet when she's down... Strangers from other towns' 'Nowhere to be found... On this side of the scene' 'Would you like a cigarette? Or my hand upon your shoulder?' 'I think we might have met. Would you like me to come over?' 'There's lovers in the backseat. Jealous glances now I'm lookin'for another song' 'On the radio... I'll take you to a side street' 'In the shadows you can touch one another now' 'And I'll just watch the show' Piensa un poco... ¡es fácil! ¿¿Insistes?? Venga hombre, ¡tú puedes! No me das NINGUNA lástima. ¡¡¡No te oigo!!! ¡Cuando caí al nido de Grongins nadie acudió en mi ayuda! Pedir ayuda es de aventureros gallinas. Antes por lo menos podías consultar al Viejo Archivero. La paciencia es la madre de la ciencia. ¿¿Sigues probando sólo por curiosidad?? Espero por tu bien que sí. ¡Te lo has ganado! Recuerdas como tu viejo abuelo acudía al MEGASALTO cada vez que perdía las llaves del coche... El Megasalto (sin.'Supersalto', Eng.'Boing') debería ser suficiente. El Megasalto no debería ser utilizado si va a conducir maquinaria pesada. El autor no se responsabiliza penal y/o civilmente de los daños causados por una utilización masiva o fraudulenta del megasalto. Tampoco de ningún BUG que tenga relación con esta opción provechosa ;) Y por favor... ¡no moleste al perro blanco! Extraña ambición contemplada por Inform. O, 'De como a todo aventurero se le ocurre cantar al menos una vez por aventura'. Empujas y mueves sin conseguir nada... al menos aparentemente... De repente te invade un profundo sopor. ¿Porqué ahora? No lo sabes, pero te acercas a tu catre con unas irrefrenables ganas de echar una cabezadita. Cierras los ojos... zzzz... zzzz... zzzz... ¡Aquí tiene su pedido Gobernador! ¡Muchas gracias Gobernador! ¡Muy honrado! No mamá... aún no me he hecho la cama... ¡No! ¡El sombrero noooo! ¡Despiertas con renovado vigor! No es el momento... ni el lugar adecuado. Pronuncias las antiguas palabras mágicas... ¡pero no ocurre nada! Salta de un lado a otro de tu hombre y no te haces con ella.\n Los seres animados no se pueden (en condiciones normales) cargar como si de un objeto se tratara.\n Prestas atención, pero no te parece oír nada fuera de lo habitual.\n Huele a humanos.\n Olfateas... pero no te parece oler nada raro.\n Cargas con tu hermano Agostine.\n Me temo que no lo llevas contigo.\n No comprendo que es lo que quieres dar.\n La termita mueve enérgicamente la cabeza de un lado a otro... parece ser que no le interesa.\n Agostine está atado, no podría sostenerlo.\n En su estado no creo que pudiera ni siquiera sostenerlo.\n ¡Te descubriría!\n Está dormida, no parece que le haga falta ahora mismo.\n No creo que a BM le haga mucha falta.\n No quieres darle nada a una planta que estuvo a punto de comerte.\n No creo que le interesara.\n Al enemigo... ¡ni agua!\n Al enemigo... ¡ni agua!\n ¿A quien quieres dar _?\n Me temo que no está por aquí.\n No puedes darle _ a un objeto inanimado.\n No comprendo que es lo que quieres sacar.\n Por favor, indica de dónde quieres sacar eso. Si ya lo hiciste prueba con otras palabras, ya que no te he entendido.\n O bien no puedes sacar nada de ahí dentro o no lo ves por aquí en este momento.\n No comprendo que es lo que quieres meter dentro.\n Por favor, indica dónde quieres meter eso. Si ya lo hiciste prueba con otras palabras, ya que no te he entendido.\n O bien no puedes meter cosas ahí dentro o bien no lo ves en este momento.\n No creo que eso le gustase mucho, ni a ti su reacción...\n No quieres ser cruel con él.\n No creo que eso le gustase mucho, ni a ti su reacción...\n No quieres ser cruel con él.\n No he comprendido lo que quieres quemar.\n Le harías demasiado daño.\n ¿Puedes hacer algo menos drástico?\n Perdona, no entendí donde quieres meter a Agostine.\n Ahí no puedes meterlo.\n Lo siento, no se que quieres lanzar.\n No estoy muy seguro de que se podría conseguir con eso.\n No veo donde pueda hacerlo.\n No se a lo que te refieres.\n Creo que eso no se puede beber.\n No puedes ir en esa dirección.\n No puedes ir en esa dirección.\n No ves nada interesante por aquí.\n Ya tienes eso.\n Eso lo llevas puesto.\n El paraguas es como la llave de tu casa... no te permite entrar, ¡pero sí salir! Mejor no dejarlo por ahí tirado.\n No llevas eso entre manos.\n No puedes dejar _, lo llevas puesto.\n No llevas eso entre manos.\n Eso no lo llevas puesto.\n Eso no lo llevas puesto.\n Eso no parece algo que puedes ponerte.\n Ya lo llevas puesto.\n No es algo que puedas ponerte.\n Perdón, no conozco ese verbo, ¿puedes decirlo con otras palabras?\n Las Aventuras de Rudolphine Rur ¡El CD!\n Ni CD ni nada... parece que te lo han quitado todo...\n La planta carnívora está aquí dentro del lago bebiendo abundante agua para tratar de calmar el picor que le provocó la pimienta.\n La pequeña termita canturrea alegremente sobre tu hombro. Estás subido sobre el cajón del elevador. A la verde sombra de un platanero, una pequeña plantita te observa desde su maceta.\n La planta carnívora se agita en un rincón, masticando y riendo.\n Como por arte de magia el interior de la pequeña seta alberga una amplia estancia ¡Trucos de ninfas! Se trata de una estancia ovalada, revestida de piedra y repleta de flores secas que confieren a la habitación un aroma apacible y que invita al sueño. En un rincón, acostada sobre un lecho de piedra, tu amiga, la ninfa Rosi, duerme... mejor dicho, hiberna los largos meses de frío. Junto a ella, su pequeña mesita de noche, y al otro lado de la estancia su pequeña cocina.\n A pesar de que la puerta está abierta, la estancia está sumida en una tenue penumbra... ¡que te impide ver nada!\n Tu zorro BM está aquí, mirándote con desconfianza.\n Tu zorro BM está aquí, relamiéndose las patas.\n Estás montado sobre tu zorro BM.\n Cargas con Agostine.\n A los pies del lecho observas también un curioso cofre.\n ¡Un curioso cofre con patas corre a tu alrededor ladrándote!\n ¡Agostine está aquí! Atado a una silla y como dormido.\n Tirado en el suelo está tu hermano Agostine, profundamente dormido.\n Te escondes tras un alto sillón, ya que aquí hay un elfo.\n Caído en el suelo hay un elfo dormido.\n El mayordomo humano está cocinando algo, con una mano remueve un guiso en un puchero mientras con la otra saltea algo en una abollada sartén.\n El mayordomo humano está cocinando, con una mano remueve un guiso en un puchero, pero en estos momentos ha soltado la sartén.\n El mayordomo humano está aquí cocinando algo en el puchero, mientras murmura asombrado: 'Maldita sartén, ¿dónde habrá caído? Si no es porqué no puedo dejar de vigilar este guiso...'\n Te encoges en el marco de la puerta cuando descubres a un elfo leyendo junto a la mesa... Por suerte, está de espaldas a ti.\n El antaño orgulloso elfo yace desvanecido en el suelo... En su cabeza empieza a insinuarse lo que dentro de poco será un chichón importante.\n Empotrada en la pared has descubierto la caja fuerte.\n ¡El paraguas! ¡Te acabas de fijar que no lo llevas contigo!\n ¡¿Como podrás bajar ahora sin él?!\n ¡Piensa Rudolph, piensa!\n ...\n ¡Reza Rudolph, reza!\n ¡Eh! ¿Qué es aquello?\n ¡Tus plegarias han sido escuchadas! Arrastrado por una suave (y extraña) brisa el paraguas se posa sobre la superficie del porche.\n Te pareció oir al cartero hace un momento... ¡Quizá sea un buen momento para revisar la correspondencia!\n ¡Tus cosas! Los elfos debieron dejarlas aquí cuando te secuestraron.\n El mayordomo - cocinero suelta un momento la sartén para girar con más fuerza el guiso que está preparando en el puchero.\n El mayordomo - cocinero vuelve a coger la sartén y empieza a preparar algo en ella.\n Un humano viejo y con cara cansada abre la puerta, parece que viste traje de mayordomo... Apenas te da tiempo a escabullirte tras una maceta para que no te descubra.\n Desde el interior de la caja oyes como abren la puerta y al viejo mayordomo gritar:\n -Señor, hay una caja en el porche.\n -¿Tiene dirección? ¿Va dirigida al Señor Goldrin? -le preguntan desde dentro de la casa.\n -No, señor.\n -Entonces debe ser cosa del jardinero. Déjala ahí, ya la recogerá mañana.\n El viejo mayordomo deja la caja y cerrando la puerta entra en el interior de la casa.\n El viejo mayordomo observa un momento la gran caja de cartón y lo oyes gritar:\n -Señor, hay una caja en el porche.\n -¿Tiene dirección? ¿Va dirigida al Señor Goldrin? -le preguntan desde dentro de la casa.\n -No, señor.\n -Entonces debe ser cosa del jardinero. Déjala ahí, ya la recogerá mañana.\n El viejo mayordomo deja la caja y cerrando la puerta entra en el interior de la casa.\n El viejo mayordomo observa la caja de cartón y lee con dificultad:\n -A la atención del señor Eldrad Goldrin...\n El viejo mayordomo recoge la caja y con ella entra en el interior de la casa cerrando la puerta.\n Algo te dice que has perdido tu ÚNICA posibilidad de entrar en la casa...\n Desde el interior de la caja oyes abrir la puerta y como el viejo mayordomo lee con dificultad:\n -A la atención del señor Eldrad Goldrin...\n Te tambaleas en el interior de la caja mientras el mayordomo la recoge y entra con ella al interior de la casa. Notas como la deja en el suelo.\n La caja... ¿seguro que fue buena idea dejarla allí? Algo te dice que has perdido la ÚNICA posibilidad de entrar en la casa.\n El mayordomo observa a izquierda y derecha y al no ver a nadie (por suerte) cierra la puerta y vuelve a sus quehaceres.\n El semáforo se pone en ámbar para los automóviles. Algunos conductores aceleran para no pillarlo en rojo.\n El semáforo se pone en rojo para los coches y un segundo después se pone en verde para los peatones.\n ¡El semáforo de los peatones parpadea!\n El semáforo de los peatones vuelve a ponerse en rojo y el de los automóviles en verde. Los autos reinician raudos su loca carrera.\n Con un leve chisporreteo la cerilla se extingue. ¡La cerilla que sostienes está a punto de apagarse! Sostienes una cerilla encendida entre tus dedos. ¡De repente tras un recodo del camino aparece el malvado pirata!\n ¡De repente tras un recodo del camino aparece el malvado pirata!\n 'Pepito Grillo Inc'\n Es por donde se meten los cd's y los disquettes en el ordenador...\n En él puedes ver la chimenea...\n No ves eso por aquí.\n Empotrada en la pared y camuflada tras un cuadro has descubierto una pequeña caja fuerte. Está cerrada.\n Está abierta. Está vacía.\n En su interior puedes ver Una enorme caja de cartón en la que fácilmente cabría un gnomo... En su parte superior has escrito una dirección... Eldrad Goldrin, el que supones dueño de la casa. La caja está vacía.\n En el interior de la caja puedes ver Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' En su interior hay cerillas. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' En su interior tan sólo queda 1 cerilla. ¡Úsala bien! Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' Está vacía. Desde aquí no se ve gran cosa de la estancia contigua.\n No eres muy ducho en gastronomía... Cucharones y espumaderas de las que el cocinero parece estar bastante pendiente.\n No entiendes nada.\n Viejos, rotos y gastados, no en vano permanecen apartado en esta estancia.\n No llegan a ser basura, pero si permanecen aquí abandonados un tiempo más así deberán ser considerados.\n La mayoría de ellos parecen escritos con extraños caracteres... élfico supones.\n Guapo, elegante, melena rubia recogida... típico aspecto de elfo... que los hace ser los seres más vanidosos y engreídos sobre la tierra. Está enfrascado en la lectura de una especie de informe y no parece haberse percatado de tu presencia.\n Tu certero golpe lo ha dejado desvanecido sobre el suelo. ¡Bien por ti Rudolphine!\n Parecen representar escenas marineras de forma bastante horrible.\n Se trata de un ordenador portátil, seguramente último modelo. Está apagado.\n Permanece mudo sobre la mesa.\n Se trata de una amplia mesa de despacho, repleta hasta los topes de papeles.\n Facturas, informes, planos... de todo un poco... pero no entiendes nada de ninguno de ellos.\n Está pintada de un bonito color cereza que da vida y calidez a esta estancia.\n Al igual que la mesa está repleto de papeles y libros. Parece que los turbios negocios en los que estén envueltos estos elfos van viento en popa.\n Con un gracioso giro bajan hasta la planta baja.\n No ves gran cosa desde aquí.\n En el techo, una cerrada puerta da acceso al desván. No alcanzas.\n Largo y oscuro, algo te dice que no necesitas ir más allá.\n En él destaca la trampilla que da acceso al desván.\n No te sorprende constatar que los elfos tienen un mayordomo / criado / cocinero humano. Aunque intentan vivir en la sombra y sin llamar mucho la atención en el mundo humano, no pierden ocasión de humillar a algunos de estos, aunque sea por un mísero salario. El mayordomo parece un pobre hombre, viejo ya, eficiente en su trabajo y del que por desgracia no puedes sino esperar lealtad para con sus amos.\n Parece que el mayordomo está preparando un delicioso guiso en el puchero... guiso que por suerte parece precisar de toda su atención.\n Grande, caliente y antiguo. De hierro colado y pintado de negro. Una reliquia aquí en el mundo humano, pero todavía se ven muchos como este en el Valle. Jurarías que las deliciosas galletas de la tía Hermianet se cocían en un horno similar.\n Repletas de herramientas culinarias.\n Útiles de cocina.\n Sorprendentemente el cocinero la sostiene en una mano mientras con la otra remueve una y otra vez el guiso del puchero.\n El cocinero la ha soltado un momento... tentadoramente cerca de donde te escondes.\n Por lo que puedes ver muy usada.\n Por lo que puedes ver muy usada. Está abollada... como si hubiese sido utilizada para golpear cabezas, como en las películas antiguas.\n Tu hermano Agostine está profundamente dormido, al parecer drogado por los malvados elfos. Observas con tristeza las marcas de la soga en sus muñecas, pero aparte de esto no parece en mal estado, tan solo profundamente cansado.\n Se trata de una jarra de vino de la que el elfo bebe cada cierto tiempo.\n No distingues desde aquí que es lo que está leyendo el elfo.\n Tu pobre hermano Agostine, atado a una silla, dormido y con la cabeza caída sobre un hombro.\n Recuerdas su cara, es el que te apresó en el parque, cuando saliste de casa de Agostine. Está ojeando un libro mientras bebe de una jarra de vino de vez en cuando.\n El elfo se encuentra caído en el suelo, con la copa de vino todavía en la mano, y aparentemente al menos profundamente dormido.\n Una pequeña estancia junto al salón, repleta de libros, pero en la que no observas nada más interesante.\n La mayoría son libros humanos, viejos, ajados y usados, la producción élfica, como la gnómica no atraviesa su mejor momento.\n Recubierto de un viejo parqué, que pide a gritos un cambio.\n Viejo y gastado, a juego con los demás muebles del salón.\n De araña, cuelga del techo, te preguntas cuantas de esas bombillas se encenderán llegada la noche.\n De araña, cuelga del techo, te preguntas cuantas de esas bombillas se encenderán llegada la noche.\n Ya han pasado su mejor época, desde luego. Una confusa mezcla de sillones, hamacas y mesas, que quizá han vivido incluso más que tú mismo.\n El salón transmite, o mejor, transmitiría una alegre calidez gracias a las paredes recubiertas de madera. Ahora, gastadas y manchadas, la paredes de madera tan solo transmiten una sorda melancolía.\n Da paso a las demás estancias de la casa. Está prácticamente vacío.\n Desde aquí puedes ver la entrada a la cocina y al salón.\n No alcanzas a ver mucho desde aquí. Está al norte.\n No alcanzas a ver mucho desde aquí. Está al este.\n Con un estudiado giro y un pasamanos de madera, las escaleras suben hasta el piso superior.\n Suave, gastado y de madera.\n La puerta de salida que te permitirá escapar, pintada de blanco por este lado. Está cerrada.\n Está abierta.\n Invita a llamar.\n La parte delantera de la casa tiene dos ventanas en el primer piso y otra pequeña al lado de la puerta. Todas al parecer firmemente cerradas.\n Observas la casa preocupadamente... no entiendes muy bien qué ha ocurrido para que esta mañana estuvieras tranquilamente en tu árbol y ahora estés aquí, perdido en medio de la ciudad tratando de entrar a una casa desconocida para salvar a tu hermano.\n Está pintada de un curioso (y bonito, aunque te cueste admitirlo) color azul. Quizá la única concesión élfica en una casa pensada para pasar desapercibida en este mundo humano. Está cerrada.\n Está entreabierta.\n Bonito. Te preguntas como consiguen estas flores de aspecto primaveral en medio de este frío otoño.\n Bonito. Te preguntas como consiguen estas flores de aspecto primaveral en medio de este frío otoño.\n Está vacío... puedes ver una dirección escrita: Mr. Eldrad Goldrin, Rochester 960. Gran Ciudad.\n Forma el perímetro exterior del jardín y separa la casa de la calle. Soldado a la verja hay un buzón.\n Tanteas la puerta y compruebas que está abierta. El camino hacia la libertad parece posible...\n Instrumento médico para oír la respiración del cuerpo humano. Peculiar instrumento médico, que sirve a estos para oír la respiración del paciente. Este en concreto parece bastante usado y tiene grabado en un lateral: Doctor A.S.M.\n Se trata de un pequeño pañuelo blanco. Se trata de un pequeño pañuelo blanco de fino tacto... todavía húmedo y que desprende un extraño olor.\n Herramientas de jardinería, mecánica y bricolaje... aunque tratándose de elfos cualquier cosa pueden ser...\n Tan sólo encuentras interesante una gran caja de cartón...\n Típicos objetos inútiles que se amontonan en los garajes (y en cualquier sitio), tratándose de elfos no es tan extraño que amontonen arpas, viejos anillos mágicos y arcos sin cuerdas, entre toda una multitud de cachivaches... no te interesan mucho...\n La puerta del garaje es amplia, se abre en vertical y de forma automática para permitir el máximo aprovechamiento de espacio.\n Todos estos aparatos para abrir o cerrar puertas automáticamente te dan algo de grima, mejor no tocarlo mucho.\n No entiendes mucho de autos... pero desde luego, estos dos no están nada mal... Aunque son un poco demasiado... umm chillones... piensas que te resultaría ridículo conducir un coche así por las estrechas sendas del Valle... ¡eso suponiendo que supieras conducir! Tanteas las puertas pero ambos están cerrados con llave.\n Gruesos cortinajes que impiden miradas indiscretas a través de las ventanas.\n Gruesos cortinajes que impiden miradas indiscretas a través de las ventanas.\n Gruesos cortinajes que impiden miradas indiscretas a través de las ventanas.\n Te permite asomarte a la ventana...\n Desgraciadamente parecen estar todas cerradas y cubiertas por cortinas excepto una...\n Una de las ventanas de la planta baja tiene la cortina entreabierta... subiéndote al pequeño escalón contemplas con cuidado el interior...\n ¡Es Agostine! Puedes ver a Agostine atado a una silla...\n ¡No se mueve! ¿Muerto?\n No... ves como respira pesadamente. Parece estar dormido, o drogado.\n Contemplas un desordenado salón, lleno hasta los topes de muebles y trastos. Por precaución no estás mucho tiempo asomado. No sabes cuantos más de estos malvados elfos pueden merodear por aquí.\n Encalada y más bien vieja. La casa consta de una planta baja y un primer piso, además del desván-trastero donde te encerraron. En esta fachada lateral puedes ver cuatro ventanas, dos en el primer piso y dos en la parte baja... A simple vista están todas cerradas, y todas excepto una, cubiertas con gruesos cortinajes.\n Cuidado y bonito.\n Las plantas y flores de este jardín parecen haber sido cuidadas con esmero y dedicación élfica... ¡típico de elfos! Dedicar todo su cuidado a plantas y florecillas y al mismo tiempo tratar de dominar el mundo y encerrar a indefensos gnomos en polvorientos trasteros...\n Las plantas y flores de este jardín parecen haber sido cuidadas con esmero y dedicación élfica... ¡típico de elfos! Dedicar todo su cuidado a plantas y florecillas y al mismo tiempo tratar de dominar el mundo y encerrar a indefensos gnomos en polvorientos trasteros...\n Las plantas y flores de este jardín parecen haber sido cuidadas con esmero y dedicación élfica... ¡típico de elfos! Dedicar todo su cuidado a plantas y florecillas y al mismo tiempo tratar de dominar el mundo y encerrar a indefensos gnomos en polvorientos trasteros...\n Las plantas y flores de este jardín parecen haber sido cuidadas con esmero y dedicación élfica... ¡típico de elfos! Dedicar todo su cuidado a plantas y florecillas y al mismo tiempo tratar de dominar el mundo y encerrar a indefensos gnomos en polvorientos trasteros...\n La típica construcción humana, unifamiliar con jardín, quizá un poco más ostentosa que la media... cuando fue construida, que sería ya hace bastantes años a juzgar por el estado de la casa. Planta baja, primer piso y el desván que (desgraciadamente) ya tan bien conoces. En esta parte trasera se abren cuatro ventanas, desgraciadamente todas cerradas.\n Las ventanas están firmemente cerradas, intentas asomarte al interior de la casa, pero gruesas cortinas cubren las cuatro ventanas.\n Cuidado y bonito.\n Objetos viejos o inservibles como los que se acumulan en cualquier casa gnómica, o humana, o al parecer, también élfica (¿qué te habías pensado?).\n Objetos viejos o inservibles como los que se acumulan en cualquier casa gnómica, o humana, o al parecer, también élfica (¿qué te habías pensado?)\n Tus ropas están recubiertas de una fina capa de jabón... resbaladizo.\n Un gnomo... como el del dibujo <;-) Tus ropas están recubiertas de una fina capa de jabón... resbaladizo.\n Un gnomo... como el del dibujo ;-) Redondos, negros y gruesos... pero quizá lo suficientemente separados para que un pequeño cuerpo de gnomo pueda caber entre ellos. Están recubiertos de una fina capa de jabón que los ha dejado levemente resbaladizos.\n Se trata de una pequeña abertura en la pared, sin duda para que la buhardilla esté ventilada. No tiene puerta ni cristal, pero si unos gruesos barrotes.\n Abuhardillado, es bajo y en forma de V invertida. Está recubierto, al igual que las paredes de una especie de espuma aislante.\n En una de ellas se abre una pequeña ventana por donde entra la escasa luz que te ilumina ahora mismo.\n ¡Pica!\n Recubierto de polvo... en él se encuentra lo que supones la entrada a este trastero... una cerrada trampilla.\n Inservibles ahora mismo...\n Rebuscas entre los montones de cajas, levantas polvo, te parece oír una rata...\n Y lo único que encuentras es una vieja pastilla de jabón y un rotulador...\n Pero no encuentras nada útil.\n La trampilla es una especie de puerta de madera que se abre en el suelo del trastero-desván. Está firmemente cerrada.\n Viejas cintas de cassete... ¿no ha oído hablar Agostine de los cd? Entre ellas Duran-Duran, Depeche Mode... todo muy del gusto de tú hermano (y no del tuyo, por precisar).\n No te avergüenza confesar que no sabes ni lo que son ni para que se usan.\n No entiendes mucho de ordenadores, justo al revés que tu hermano Agostine, por lo que no tienes ni idea del modelo, o si es moderno o viejo... Para ti tan solo ves una pantalla, un teclado y la ¿CPU? Está apagado.\n Está encendido.\n Casi no la encuentras entre la multitud de trastos que tiene encima, alrededor e incluso debajo. Tiene dos ranuras, una para disquettes y otra para cds. Ahora mismo en su interior tiene un disquette.\n Ahora mismo en su interior tiene un cd-rom.\n Listo para ser aporreado... digo, tecleado.\n La pantalla permanece oscura.\n La pantalla tiene ahora un intimidante color azul, en el que se puede leer:\n INTRODUZCA SOPORTE\n Sobre la ya conocida pantalla azul aparece el siguiente texto:\n TECLEE CLAVE DE ACCESSO:\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n You are in a gloomy empty land with dreary hill ahead.\n To the west there is the round green door.\n Visibles exits are: east north northeast\n You see:\n Thorin.\n You are in the trolls clearing.\n Visibles exits are: southwest southeast north\n You see:\n Thorin.\n The hideous troll.\n The vicious troll.\n You are in a hidden path with trolls foot prints.\n To the north there is the heavy rock door.\n Visible exits are: south.\n You see:\n Thorin.\n El vestuario de Agostine es todo menos moderno... además, estar hecho un revoltijo sobre sillas y muebles no ayuda mucho a que tenga mejor aspecto. ¡En un bolsillo de una camisa encuentras algo! ¡Un disco de ordenador y un cd!\n Principalmente son libros de ingeniería, matemáticas (¿matemática discreta?) y AutoCad... Agostine, por si no os había informado todavía, es ingeniero.\n Doblado cuidadosamente entre los libros encuentras un periódico.\n Permanece abierta, no quieres correr el riesgo de quedarte aquí dentro encerrado.\n 'Home Sweet Home' Parece que mamá trajo felpudos para toda la familia... ¡Un momento! Bajo el felpudo encuentras una nota.\n Una enorme caja de cartón en la que fácilmente cabría un gnomo... En su parte superior has escrito una dirección... Eldrad Goldrin, el que supones dueño de la casa. La caja está vacía.\n En el interior de la caja puedes ver Un rotulador permanente negro. Se trata de un gordo rotulador permanente, color negro.\n Una vieja pastilla de jabón. Una vieja, pero apenas usada pastilla de jabón en la que aún se lee con dificultad NH Hoteles.\n Sobre su cara hay dos letras escritas: AR.\n Sobre su cara hay dos letras escritas: AR. A juzgar por el título y el diseño (¡tan aburrido!) debe tratarse de unas de las prestigiosas publicaciones científicas a las que estaba suscrito Agostine.\n A juzgar por el título y el diseño (¡tan aburrido!) debe tratarse de unas de las prestigiosas publicaciones científicas a las que estaba suscrito Agostine. Una nota manuscrita con la descuidada caligrafía de Agostine.\n Una pequeña nota. La puerta está cerrada. Ante ella ves un felpudo.\n Tu fuerte empujón dejó la puerta abierta. Ante la puerta ves un felpudo.\n Se trata de una fuente de piedra, de forma circular y con unas curiosas figuras en su centro...\n ¡En un lateral descubres una pequeña puerta! ¡La puerta de la casa de Agostine!\n No estás muy seguro de que representan. Se trata de un niño y una niña. El niño toca una flauta y la niña tiene un pajarillo sobre su hombro. Si este fuera el verdadero sentir humano no haría falta que gnomos y humanos vivieran separados, pero sabes que por desgracia se trata sólo de un espejismo.\n Cuidado y asfaltado. Se adentra hacia el interior del parque.\n Las ramas de la entrelazada vegetación forman un curioso y agradable techo vegetal.\n Te avergüenzas de no saber que tipo de planta es esta.\n Te avergüenzas de no saber que tipo de planta es esta.\n Una grata extensión de tierra verde y vegetación en medio de la ciudad. Un lugar agradable, sí señor.\n Negra y amenazadora. ¿Para que vallar un parque? te preguntas con tu cándida ingenuidad gnómica.\n Permanece abierta.\n Pulse para cruzar.\n Rojo, redondo y pulsable.\n La ciudad se extiende en todas direcciones. Siempre has conocido a esta ciudad humana como la Gran Ciudad y no sabes si tiene otro nombre en humano, élfico o cualquiera de las lenguas habladas.\n Un taxi es una especie de automóvil comunitario que utilizan los humanos para desplazarse de un sitio a otro.\n Junto a ti se alza un semáforo, alto, flaco y amarillo. En su parte inferior puedes ver un botón, y a su lado un aviso: pulse para cruzar. En estos momentos el semáforo está en verde para los automóviles y en rojo para los peatones.\n Junto a ti se alza un semáforo, alto, flaco y amarillo. En su parte inferior puedes ver un botón, y a su lado un aviso: 'Pulse para cruzar'. En estos momentos el semáforo está en rojo para los automóviles y en verde para los peatones.\n No es muy amplia y no crees que al atravesarla llames mucho la atención... pero los automóviles pasan a toda velocidad.\n En este momento los automóviles están detenidos ante el semáforo en rojo.\n Te animas un poco al observar las altas copas de los árboles que asoman desde el Parque Central al otro lado de la calle.\n Te animas un poco al observar las altas copas de los árboles que asoman desde el Parque Central al otro lado de la calle.\n La calle está franqueada por altos edificios residenciales. No entiendes como tanta gente puede vivir junta en aparente armonía. Nada que ver con los árboles-vivienda del Valle.\n Los humanos son gente curiosa que parece que vaya siempre con prisa. No conoces a muchos humanos personalmente, pero por lo que sabes de ellos no te pierdes gran cosa, ya que suelen ser malhumorados, descuidados y algo locos.\n Máquinas grandes, y ruidosas que no respetan ni a gnomos ni a animales pequeños. Parecen atestar las calles de la ciudad.\n Llenan los bajos de los edificios, con humanos entrando y saliendo de ellas cargados con innumerables bolsas.\n Al fondo del callejón empieza la bulliciosa ciudad...\n Un callejón sucio y maloliente, lo bastante cerca del Parque Central, pero lo bastante apartado para que BM puede esperarte aquí sin peligro.\n Para ti altas, pero entrañables y familiares. Para un humano, altas y amenazadoras.\n Igual que para salir de él, la carretera es la más rápida forma de entrar en el Valle.\n Las rutas a través de las montañas pueden ser laberínticas. No tienes ninguna necesidad de ir por allí, pero, quién sabe...\n Altas y amenazadoras.\n Las rutas a través de las montañas pueden ser laberínticas. No tienes ninguna necesidad de ir por allí, pero, quién sabe...\n El camino recto para salir del Valle. De reciente construcción, suscitó encontradas discusiones sobre la conveniencia o no de esta. Tú mismo votaste en contra, lo que hizo que el Doctor (gran defensor y impulsor de la idea) estuviera un tiempo sin hablarte.\n Está cerrada.\n La abriste y está casi sepultada por cientos de objetos.\n A tu mente solo acude un pensamiento: el tridente es un tesoro.\n El tridente es un tesoro. Está en el interior del cajón del elevador.\n Cientos y cientos de ellos... forman parte del botín del pirata, que durante años ha robado a incautos aventureros en estos y otros parajes.\n La Guarida del Malvado Pirata. Se trata de un rústico caserío, que un su concepción original pretendería imitar la silueta de un barco. Un lugar extraño para un personaje extraño. Su atrancada puerta está cerrada.\n La Guarida del Malvado Pirata. Se trata de un rústico caserío, que un su concepción original pretendería imitar la silueta de un barco. Un lugar extraño para un personaje extraño. Su puerta está abierta y bloqueada por cientos de objetos.\n La Guarida del Malvado Pirata. Se trata de un rústico caserío, que un su concepción original pretendería imitar la silueta de un barco. Un lugar extraño para un personaje extraño. Su atrancada puerta está cerrada.\n La Guarida del Malvado Pirata. Se trata de un rústico caserío, que un su concepción original pretendería imitar la silueta de un barco. Un lugar extraño para un personaje extraño. Su puerta está abierta y bloqueada por cientos de objetos.\n Te parece haberla visto ya en tu deambular entre las montañas. ¿O no y será otra? ¡Ay! Todas las rocas te parecen ya iguales.\n Te parece haberla visto ya en tu deambular entre las montañas. ¿O no y será otra? ¡Ay! Todas las rocas te parecen ya iguales.\n Has intentado tomarlos como punto de referencia, pero las nevadas cumbres que brillan al sol se confunden unas con otras, hasta llegar a marearte con su reflejo.\n Has intentado tomarlos como punto de referencia, pero las nevadas cumbres que brillan al sol se confunden unas con otras, hasta llegar a marearte con su reflejo.\n Todas te parecen ya iguales... ¡Igual de malas quiero decir!\n Todas te parecen ya iguales... ¡Igual de malas quiero decir!\n Todos te parecen ya iguales... ¡Igual de malos quiero decir!\n Todos te parecen ya iguales... ¡Igual de malos quiero decir!\n La caseta de BM, sólidamente construida gracias a los planos de tu hermano Agostine (no en vano abandonó la tradición familiar de zapatero para hacerse ingeniero).\n El claro de las celebraciones familiares. Frío y solitario a la sombra de los árboles.\n Jóvenes en esta parte del bosque.\n Tu zorro BM (abreviatura de Brian Molko, extraño nombre que tu alocada hermana le dio hace años) ha sido fiel compañero de correrías tuyo y de tus hermanos durante largos años. Sin embargo, ahora está enfadado contigo porqué no le dejaste marchar junto a tu hermano Agostine (¡su favorito!) a la ciudad cuando este se fue. Desde entonces te ignora, no te deja montarlo y te gruñe cuando te acercas.\n Tu zorro BM (abreviatura de Brian Molko, extraño nombre que tu alocada hermana le dio hace años) ha sido fiel compañero de correrías tuyo y de tus hermanos durante largos años. De pelaje rojo, ágil y rápido, un gran amigo y el mejor medio de locomoción que cualquier gnomo quisiera tener.\n La salchicha está cubierta de un pegajoso líquido azul.\n La salchicha está cubierta de un pegajoso líquido azul.\n Una salchicha de aspecto apetitoso.\n Una salchicha de aspecto apetitoso. Está en el interior del cajón del elevador.\n Una seca y aplastada rosa que desprende un aroma adormecedor.\n Una seca y aplastada rosa que desprende un aroma adormecedor. Está en el interior del cajón del elevador.\n Rosas secas que desprenden un curioso aroma adormecedor.\n Comparar la graciosa y limpia cocina de Rosi con la tuya es algo odioso. Encuentras una pizca de pimienta.\n Comparar la graciosa y limpia cocina de Rosi con la tuya es algo odioso.\n Recostada en su duro lecho de piedra, Rosi, la ninfa, descansa los duros meses de invierno. El cabello le ha crecido espectacularmente durante el sueño, pero no oculta todavía su bello y sereno rostro. ¡Recuerdas como lo primero que hace nada más despertar es acudir a la peluquería! Mirándola recuerdas ahora como te dejó la llave de su casa por si ocurría alguna urgencia. ¡Cuanto se sorprendería si despertara ahora y te viera aquí mirándola!\n La mesilla de noche de Rosi está toda llena de pequeños objetos... ¡tiene que estar preparada para dormir casi seis meses de un tirón! Entre los distintos objetos destaca una vieja fotografía del Doctor.\n Nada en especial. Lo más interesante es la vieja fotografía del Doctor.\n Observas con una sonrisa la vieja fotografía del Doctor, su melena leonina, su gastado traje... En la parte de atrás de la foto puedes leer. 'A mi querida Rosi. Sin duda la persona más especial del Valle'.\n Te agachas para observar más de cerca el curioso cofre...\n GUAAU!!! ¡El cofre se levanta de un salto! Observas pasmado como el cofre se pone a corretear a tu alrededor ladrándote.\n Por increíble que parezca se trata de un cofre con patas... que sin duda se cree un perro. Te olfatea y te ladra mientras corre alrededor de ti.\n Es un suelo rico en humus y nutrientes. No te extraña que en él halla crecido esta hermosa seta.\n Una graciosa, grande y colorada seta ha crecido a la sombra del viejo tocón muerto. No te extraña que haya alcanzado su tamaño en este suelo rico y húmedo. ¡Un momento! Casi desapercibida pasa una pequeña puerta en un lateral de la seta.\n En su superficie ves grabada una solitaria letra R. ¡Ahora recuerdas! Es la puerta de entrada a la casa de tu amiga la ninfa Rosi. Junto a la puerta ves una campanilla. La puerta está cerrada.\n La puerta está abierta.\n Una pequeña campanilla dorada que cuelga junto a la puerta a modo de timbre.\n Desde aquí las todavía lejanos montañas parecen mucho más amenazadoras que desde tu casa.\n Bastante amplio... antes era mucho más transitado... antes de estos sinistros tiempos... antes del imperio...\n ¡Pero bueno, que estoy diciendo! Ejem... Se trata de un camino amplio, no en vano es la principal vía de comunicación del Valle con el mundo exterior. Está cubierto de hojas.\n Cubren el camino de un manto verde - marrón. ¡Ya es otoño en el corte inglés!\n Se trata del tocón de un viejo árbol muerto. Seco y casi devorado por los insectos.\n La pequeña termita mira al tocón abriendo mucho sus ojitos... Finalmente de un salto abandona tu hombro y se posa sobre el tocón. Antes de desaparecer entre sus recovecos te parece oír un lejano sollozo cantarín: 'Adiós'\n Se trata del tocón de un viejo árbol muerto. Seco y casi devorado por los insectos.\n Se trata del tocón de un viejo árbol muerto. Seco y casi devorado por los insectos.\n Los árboles de esta parte del bosque son viejos y carcomidos. En las alturas parecen rozar rama contra rama para asegurarse que sus viejos compañeros siguen ahí. Un leve rumor, como el eco de una conversación muda agita el aire.\n La Carnívora Vera se zambulle en el agua y bebe de la cascada con avidez, tratando de mitigar el picor que le provocó la pimienta. Ahora ya no se ríe.\n A pesar de los rayos del sol que penetran por sus acristaladas paredes, el interior del invernadero permanece en penumbra por la cantidad de plantas que crecen descontroladamente en él.\n Una de las paredes está destrozada, justo por donde la planta carnívora Vera salió saltando.\n Todo tipo de plantas crecen descontroladamente desde que el Doctor dejó de ocuparse del invernadero. Te preguntas porqué lo cerró con llave y no te dejó a ti o algún otro de sus amigos encargados de cuidar sus plantas.\n Todo tipo de plantas crecen descontroladamente desde que el Doctor dejó de ocuparse del invernadero. Te preguntas porqué lo cerró con llave y no te dejó a ti o algún otro de sus amigos encargados de cuidar sus plantas.\n ¡La planta carnívora agita sus raíces, mordisquea el aire y ruge! Recuerdas las viejas historias sobre la Carnívora Vera que devoró a tres gnomos el día de su cumpleaños. Está destrozando el invernadero, ¡hay que buscar la forma de deshacerse de ella!\n La plantita parece susurrar algo...\n El agua cae desde no mucha altura entre las rocas, formando un bello espectáculo. El rumor del agua al caer y la humedad en el ambiente confiere a este claro un encanto especial.\n Fría y cristalina. Puro manantial de montaña.\n Superado el salto de agua y el pequeño lago, el estrecho riachuelo se aleja mansamente entre los árboles recubiertos de musgo y líquenes.\n El pequeño lago presenta orillas escapadas... era muy fácil lanzarse a él... pero solo tú sabes lo que te costaba salir una vez dentro...\n Tras el salto de agua se forma un pequeño lago, no muy profundo, de aguas frías y cristalinas. Tus primeras brazadas las diste aquí, y aquí has pasado innumerables tardes de verano con tus amigos... Hasta donde tu puedes recordar nunca viste ni solo pez en este lago.\n Los árboles se yerguen a ambos lados del riachuelo, hundiendo sus viejas raíces en él... por el efecto del frío y la humedad están recubiertos de una espesa capa de musgo y líquenes que les confieren un curioso color verde. Sus ramas superiores se retuercen buscando los rayos del sol. Son verdaderos árboles de cuento.\n Se hace más densa conforme te acercas a la orilla del lago. Verde y saludable. No se pueden quejar, no.\n Una pequeña y negruzca pizca de pimienta... sabrosa, pero muy picante.\n Una pizca de pimienta. Está en el interior del cajón del elevador.\n Un tapón de corcho, redondo y no muy largo que tapona la botella.\n Un tapón de corcho, redondo y no muy largo. Un tapón de corcho, redondo y no muy largo.\n El frasco contiene un líquido azul, no muy espeso... el extraño elixir para olvidar... del que precisamente no recuerdas haber oído hablar nunca. Se trata de un pequeñito frasco de cristal de forma extraña. Se trata de un pequeñito frasco de cristal de forma extraña y lleno de un extraño líquido azul. Tiene una etiqueta pegada en la que puedes leer 'Elixir para olvidar'. Está tapado por un tapón de corcho.\n Está abierto.\n Se trata de una senda que atraviesa el bosque en dirección norte-sur. Aquí termina frente a la puerta del invernadero, hacia el sur te conduce a tu claro.\n Esta parte del bosque está invadida de helechos y matorrales, que amenazan las herrumbrosas paredes del invernadero. Dentro de este, la cuidada vegetación original ha dado paso a una exhuberancia salvaje.\n Evocas la imagen del Doctor, con su negra barba y su frondosa cabellera... ¿qué habrá sido de él?\n Se trata de una vieja regadera metálica, modelo clásico, muy desmejorada seguramente por haber pasado una larga temporada a la intemperie. Observas con tristeza que tiene incluso un pequeño orificio casi redondo en una de sus caras. Satisfecho observas el apaño que has hecho en el orificio con la ayuda del tapón de corcho. Está vacía.\n Está llena de agua.\n Se trata de una vieja regadera, modelo clásico, muy desmejorada seguramente por haber pasado una larga temporada a la intemperie. Viejo y oxidado... no resistirá mucho más.\n Ya de deshiciste de él.\n La desvencijada puerta del invernadero está cerrada por un viejo candado. Abierta a la fuerza, la puerta se sostiene más mal que bien por uno sólo de sus goznes. Blanco y acristalado, conserva todavía el estilo aristocrático que tuvo cuando fue construido, pero ahora la suciedad y el abandono están empezando a hacer mella en él. Tiene una desvencijada puerta cerrada por un viejo candado. Ahora el invernadero está abierto. Varias cuidadas sendas de tierra apisonada y delimitadas por piedras se cruzan en el centro del claro y se adentran en lo más profundo del bosque.\n Varias cuidadas sendas de tierra apisonada y delimitadas por piedras se cruzan en el centro del claro y se adentran en lo más profundo del bosque.\n Blancas piedras se han colocado a intervalos regulares a lo largo de las sendas para delimitar estas. Alzas la cabeza y entre las ramas del árbol puedes apenas distinguir las formas de tu elevada casa. Verde y frondoso, menos poblado que hace unos años, es lo que todo gnomo puede desear como hogar. Rodeado de árboles por todas partes, el claro se constituye en un agradable cruce de caminos para varias de las sendas que cruzan el bosque de lado a lado. Desde aquí tan solo puedes apreciar el típico formulario de correos.\n Se trata de una pequeña llave, con una solitaria letra R grabada en la parte superior.\n Se trata de una pequeña llave, con una solitaria letra R grabada en la parte superior. Desde aquí tan solo puedes apreciar el típico formulario de correos. DESTINATARIO: Rudolphine Rur. Casa del Árbol s/n. Claro del Bosque. Valle.\n REMITENTE: Agostine Rur. Fuente Fantasía. Parque Central. Gran Ciudad.\n ¡Se trata de un telegrama de tu hermano Agostine!\n Desde aquí tan solo ves que se trata de un grueso sobre.\n Desde aquí tan solo ves que se trata de un grueso sobre. Una gruesa carta...\n DESTINATARIO: Dr. Van Hallen. Vlaming Straat. Brujas.\n REMITENTE: Josep Coletas (¿Coletes?) Caubet. Torà. Lleida.\n Sin duda se trata de un error del servicio postal...\n Se trata de un pedazo de vidrio de las destrozadas paredes del invernadero. Lo manejas con cuidado, ya que por un lado está afilado como un cuchillo. Se trata de un pedazo de vidrio de las destrozadas paredes del invernadero. La cuerda está atada con un nudo pequeño pero puñetero. El simpático cartero debió atarlo a conciencia después de dejar la correspondencia. Viejo, gastado y destartalado. Su sujeción al suelo no es muy segura. Lo encontraste tirado en un Eco-Parque y decidiste usarlo. Una nueva muestra de la economía gnómica. Tu relación con la Gnomo-Postal-Service se ha deteriorado bastante por esta decisión, ya que ellos 'subvencionan' buzones nuevos a unos módicos precios. El buzón está cerrado. Una cuerdecilla sostiene la tapa.\n Ahora el buzón permanece abierto. En el interior del buzón puedes ver Observas orgulloso tu ingenioso sistema elevador. Este consiste básicamente en un enorme muelle anclado al suelo que sostiene en su parte superior una pequeño cajón de madera. El muelle está ahora mismo extendido y el cajón queda varios palmos por encima del suelo. Aplastado por el peso de la piedra, el muelle está comprimido, quedando el borde del cajón tan solo un par de palmos por encima del suelo. Dentro del cajón puedes ver Se trata de una piedra casi cuadrada, de aspecto pesado, aunque unos huecos en ambos laterales permiten cogerla con facilidad. En la parte superior puedes observar toscamente talladas las iniciales 'R.R.' Se trata de una piedra casi cuadrada, de aspecto pesado, aunque unos huecos en ambos laterales permiten cogerla con facilidad. En la parte superior puedes observar toscamente talladas las iniciales 'R.R.' Extraño... te preguntas que utilidad podría tener... Extraño... te preguntas que utilidad podría tener... Típico paraguas gnómico, de color oscuro (como corresponde a los gnomos masculinos) y tamaño medio (exactamente como la mitad de tu estatura). Construido con flor seca de nenúfar y varillas de madera de pino. El un lateral sobresale una etiqueta: 'Pepito Grillo Inc.' Está abierto. Está cerrado. Típico paraguas gnómico, de color oscuro (como corresponde a los gnomos masculinos) y tamaño medio (exactamente como la mitad de tu estatura). Construido con flor seca de nenúfar y varillas de madera de pino. El un lateral sobresale una etiqueta: 'Pepito Grillo Inc.' Está cerrado. Está abierto. Viejo y robusto es la definición que más pronto te viene a la cabeza cuando piensas en 'tu' árbol. Aunque según el certificado de propiedad (que debes conservar en alguna parte) el árbol forma parte de tus pertenencias estás seguro que mucho tiempo después de que tú desaparezcas el árbol seguirá aquí, igual que estaba ya mucho tiempo antes de que tú aparecieras por aquí. Viejo y robusto es la definición que más pronto te viene a la cabeza cuando piensas en 'tu' árbol. Aunque según el certificado de propiedad (que debes conservar en alguna parte) el árbol forma parte de tus pertenencias estás seguro que mucho tiempo después de que tú desaparezcas el árbol seguirá aquí, igual que estaba ya mucho tiempo antes de que tú aparecieras por aquí. Cientos de ellos. Tu casa está construida entre las ramas de un robusto y viejo árbol, un lugar no adecuado para humanos con vértigo (bah!) pero muy corriente entre los gnomos. Para conseguir este árbol tuviste que pujar duro en la subasta del Valle contra una numerosa familia de ardillas. Pero ganaste... y aquí estás. La puerta de tu casa está abierta. El tejado de la casa tiene forma de V invertida y está recubierto de tejas de barro cocido, cortesía del viejo Doctor (le sobraron al recubrir el tejado de su vieja casa). Desde aquí tienes una magnífica vista de tu querido bosque. Verde y frondoso, menos poblado que hace unos años, es lo que todo gnomo puede desear como hogar. Abajo, junto a tu árbol, puedes ver el tapizado suelo del claro. La distancia (vertical) desde aquí es como mínimo considerable. Decoradas columnas sostienen el techo del porche. El equipo de albañiles y carpinteros que construyeron tu casa realizaron un trabajo a la altura de la factura que presentaron. Una muralla de negras y nevadas montañas separa el Valle del mundo humano exterior. Si alguna vez tuvieron nombre ya ha sido olvidado. Amadas y temidas por igual por todos los habitantes del Valle, pocos son los que se han atrevido a escalar sus empinadas cuestas. Algunos afirman que están habitadas por gigantes... pero los gnomos juiciosos como tú no creen en estas y otras criaturas de leyenda. El banco es otra muestra de artesanía gnómica de las muchas que conservas en tu hogar. Fue el regalo de tu abuelo el día que decidiste emanciparte. Él, como todos los gnomos ancianos no entiende la vida sin un buen banco donde descansar y una buena pipa con la que fumar. Apoyado en el banco se encuentra tu viejo paraguas. El banco es otra muestra de artesanía gnómica de las muchas que conservas en tu hogar. Fue el regalo de tu abuelo el día que decidiste emanciparte. Él, como todos los gnomos ancianos no entiende la vida sin un buen banco donde descansar y una buena pipa con la que fumar. Forma un porche amplio y laminado... el preludio perfecto a una perfecta casa.- repetía una y otra vez el agente inmobiliario. Circundado por una alta cadena montañosa la mayor parte del Valle está cubierta por un frondoso bosque, entre los que conviven las más diversas especies vegetales. El Valle es el lugar de donde nunca quisieras irte y a donde siempre querrías volver. Es... tu hogar. Circundado por una alta cadena montañosa la mayor parte del Valle está cubierta por un frondoso bosque, entre los que conviven las más diversas especies vegetales. El Valle es el lugar de donde nunca quisieras irte y a donde siempre querrías volver. Es... tu hogar. Se trata de una vela gnómica hecha a base de un material parecido a la cera pero que nunca se extingue. Está apagada. Se trata de una vela gnómica hecha a base de un material parecido a la cera pero que nunca se extingue. Está encendida. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' En su interior hay cerillas. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' En su interior tan sólo queda 1 cerilla. ¡Úsala bien! Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' Está vacía. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' Está vacía. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' En su interior hay cerillas. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' En su interior tan sólo queda 1 cerilla. ¡Úsala bien! Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' Está vacía. Se trata de una pequeña caja de cerillas en donde puedes leer la publicidad (¿engañosa?): 'interlap.com.ar tu correo POP3 ¡gratis para toda la vida!' Está vacía. Mírala que ojitos tiene... ¡es idéntica a su padre! Canturrea alegremente sobre tu hombro. >>>>Y tú de donde sacas que hay un baúl por aquí, majete?? Ah! el gráfico... verás... los gráficos no los hago yo, son escaneados y me tengo que conformar con lo que sale y además en una aventura es el texto lo importante y así que nada de intentar abrir baúl con llave misteriosa ni nada por el estilo!!!!<<<< Extrañas voces resuenan en tu cabeza... Pero pronto todo vuelve a la normalidad. En un rincón bajo la ventana el baúl está bañado por el sol. Su interior... vacío como tu cuenta corriente! Nunca has hecho mucho caso a las tendencias. Algunos abrigos y chaquetas. Tu pijama y poco más. Rebuscando en los bolsillos encuentras una misteriosa llave... Nunca has hecho mucho caso a las tendencias. Algunos abrigos y chaquetas. Tu pijama y poco más. No te dejes impresionar por la palabra 'magia'. No se trata de ¡magia! (o mejor aún tu preferido 'magia potagia'). Estos objetos 'mágicos' pueden desafiar alguna ley física (ingravidez, invisibilidad, etc), pero sólo tú sabes la dedicación en tiempo y dinero que te ha llevado su construcción. Además, ¡su consumo de baterías es inaudito! por lo que mejor dejarlos donde están. Redonda y verde... puro estilo hobb... digo gnomo... Permanece abierta. Acristalada y aclimatada. Deja pasar la luz pero no el calor. Un lujo. ¡Los perdiste! Un regalo de tu prima Esther. Regalo de mamá. Según ella lo compró durante un viaje a Estados Unidos durante su quincuagésimo-tercer aniversario de boda. Según tu padre fue un regalo de la tía Emegilda. Peludo, polvoriento y con la sonriente inscripción 'Home sweet home'. La chimenea que no suele faltar en todo hogar gnomo. Austera y funcional. Hace años que no la enciendes. Casi tantos como desde que el nuevo guardabosques prohibió cortar leña en unos cientos de millas a la redonda. Encima de la chimenea encuentras una caja de cerillas. La chimenea que no suele faltar en todo hogar gnomo. Austera y funcional. Hace años que no la enciendes. Casi tantos como desde que el nuevo guardabosques prohibió cortar leña en unos cientos de millas a la redonda. ¡No tienes reloj! ¡Eres un hombre libre de las ataduras y obligaciones del tiempo! Bueno, ejem... ¡menos los días laborales! Ennegrecidos, aboyados y amontonados los enseres ocupan buena parte de la cocina. La gastronomía por desgracia no es tu fuerte. Ennegrecidos, aboyados y amontonados los enseres ocupan buena parte de la cocina. La gastronomía por desgracia no es tu fuerte. Entre unas cosas y otras encuentras un arenque rojo y una salchicha. Ennegrecidos, aboyados y amontonados los enseres ocupan buena parte de la cocina. La gastronomía por desgracia no es tu fuerte. Entre unas cosas y otras encuentras un arenque rojo y una salchicha. Ennegrecidos, aboyados y amontonados los enseres ocupan buena parte de la cocina. La gastronomía por desgracia no es tu fuerte. Se trata de tu viejo martillo de zapatero. Ancho, de madera y roído por las termitas. No en vano lo heredaste de tu abuelo cuando cumpliste la mayoría de edad y decidiste abandonar la universidad. Ah, loca juventud... ¡pero que se le puede reprochar a un joven de 83 años! El martillo... tan temido por las puntas de los zapatos como por los zagales del árbol vecino. Una pequeña termita sale del martillo y se posa amorosamente sobre tu hombro. Se trata de tu viejo martillo de zapatero. Ancho, de madera y roído por las termitas. No en vano lo heredaste de tu abuelo cuando cumpliste la mayoría de edad y decidiste abandonar la universidad. Ah, loca juventud... ¡pero que se le puede reprochar a un joven de 83 años! El martillo... tan temido por las puntas de los zapatos como por los zagales del árbol vecino. Se trata de tu viejo martillo de zapatero. Ancho, de madera y roído por las termitas. No en vano lo heredaste de tu abuelo cuando cumpliste la mayoría de edad y decidiste abandonar la universidad. Ah, loca juventud... ¡pero que se le puede reprochar a un joven de 83 años! El martillo... tan temido por las puntas de los zapatos como por los zagales del árbol vecino. Una pequeña termita sale del martillo y se posa amorosamente sobre tu hombro. Se trata de tu viejo martillo de zapatero. Ancho, de madera y roído por las termitas. No en vano lo heredaste de tu abuelo cuando cumpliste la mayoría de edad y decidiste abandonar la universidad. Ah, loca juventud... ¡pero que se le puede reprochar a un joven de 83 años! El martillo... tan temido por las puntas de los zapatos como por los zagales del árbol vecino. Tu desvencijado catre ¡Cuantos sueños (y pesadillas) has vivido mientras te acurrucabas entre sus mantas! Viejo y puntiagudo, el sombrero gnómico es un elemento esencial de tu vestimenta: te protege la cabeza del frío, te ayuda a pensar y sostiene una vela... Me temo que no he entendido qué es lo que quieres examinar.\n No tiene nada más destacable.\n Deberás recurrir de nuevo al megasalto.\n La única salida es oeste, hacia el despacho.\n Hacia el oeste vuelves al pasillo. Hacia el este hay otra estancia.\n Hacia el este entras en el despacho. También puedes bajar a la planta baja por las escaleras.\n Hacia el sur vuelves al recibidor.\n La única salida es oeste, hacia el recibidor.\n Hacia el norte queda la cocina, hacia el este una estancia amplia que parece ser una especie de salón. Las escaleras suben al piso superior. La puerta de salida os permitirá escapar si rescatas a Agostine.\n Hacia el sur queda la verja de salida, hacia el norte rodeas la casa caminando por el jardín. Seguro que se te ocurre la forma de entrar en la casa.\n Hacia el norte está la entrada de la casa, salir te proporcionará la libertad.\n La única opción es salir.\n Hacia el oeste sales del garaje otra vez al jardín.\n Las salidas posibles son, norte para ir a la parte de atrás, este para entrar al garaje y sur para ir a la fachada principal de la casa.\n Puedes rodear la casa caminando hacia el sur.\n Aparentemente estás encerrado sin salida... ¿o no?\n La única salida es salir.\n La fuente y la vegetación forman un callejón sin salida, ahora mismo tu única salida es oeste.\n Entrar a casa de Agostine y caminar hacia el oeste hacia la salida del parque son tus opciones.\n Hacia el este llegas casi al centro del Parque. La salida se encuentra hacia el oeste.\n Hacia el este te internas en el interior del parque. Hacia el oeste cruzas la calle hacia las afueras de la ciudad.\n Hacia el norte regresas al oscuro callejón. La ciudad se extiende en todas direcciones, pero no tienes tiempo para hacer turismo, así que lo mejor sería cruzar la calle para llegar al parque.\n Hacia el norte abandonas la ciudad y tomas el camino del Valle. Hacia el sur te acercas al Parque Central dónde vive tu hermano.\n Hacia el oeste tomas la carretera que te llevará al interior del Valle. Hacia el norte penetras en el macizo montañoso. Hacia el sur empieza el mundo humano.\n Hacia el este vuelves al claro.\n La única salida posible es salir.\n Hacia el oeste vuelves a 'tu' claro. Hacia el sur oyes un leve murmullo de agua. Entrar a la seta, aunque parezca raro también debe de ser una posible salida.\n Hacia el norte llegas al claro, hacia el sur el camino te lleva hacia la salida del Valle.\n Tan solo puedes salir al bosque otra vez.\n Hacia el norte puedes desandar lo andado...\n Hacia el sur puedes volver al claro bajo tu árbol. También puedes tratar de entrar en el invernadero.\n Hacia el este puedes tomar el camino largo para atravesar las montañas, hacia el oeste penetras en el interior del macizo montañoso. Hacia el norte te adentras en el Valle.\n Hacia el oeste puedes tomar el camino largo para regresar al Valle, hacia el norte puedes regresar al Valle atravesando las montañas.\n Hacia el este y hacia el sur los intrincados senderos montañosos se extienden.\n La red de sendas montañosas se extienden en todas direcciones, norte, sur, este y oeste.\n La red de sendas montañosas se extienden en todas direcciones, norte, sur, este y oeste.\n La red de sendas montañosas se extienden en todas direcciones, norte, sur, este y oeste.\n La red de sendas montañosas se extienden en todas direcciones, norte, sur, este y oeste.\n La red de sendas montañosas se extienden en todas direcciones, norte, sur, este y oeste.\n La red de sendas montañosas se extienden en todas direcciones, norte, sur, este y oeste.\n Atravesando la puerta puedes salir al porche exterior. Atravesando la puerta puedes entrar en la casa. Miras hacia abajo pensativamente, pensando como podrías llegar hasta el suelo. Varias sendas se pierden hacia el norte, el sur, el este y el oeste. Miras pensativamente a tu casa pensando en la forma de conseguir llegar hasta ella. ¡El malvado pirata te roba _!\n El malvado pirata se marcha contento con su botín.\n El pirata se marcha sin robarte nada, ¡has tenido suerte!\n No tienes más ganas de jugar a este estúpido juego... ¿teclear las órdenes? ¿qué estamos, en 1980? Prefieres tu PS2.\n Sacas el disquette del ordenador.\n Now the green door is open.\n The door is locked.\n The door is locked.\n Now the green door is closed.\n You take the curious map.\n You examine the curious map.\n There seem to be some symbols on it but you cannot read them.\n Thorin says: 'Hurry up'\n The green door is closed.\n En la pantalla aparece otro feucho dibujo de un ¿prado? y el siguiente texto:\n You are in a gloomy empty land with dreary hill ahead.\n To the west there is the round green door.\n Visibles exits are: east northeast\n Thorin enters.\n You are in a hidden path with trolls foot prints.\n To the north there is the heavy rock door.\n Visible exits are: south.\n You see: nothing.\n Thorin enters.\n You are in a hidden path with trolls foot prints.\n To the north there is the heavy rock door.\n Visible exits are: south.\n You see: nothing.\n Thorin enters.\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin enters.\n Parece que los gráficos no van a mejorar... Debajo de lo que parece ser un claro de un bosque aparece...\n You are in the trolls clearing.\n Visibles exits are: southwest southeast north\n Thorin enters.\n You see:\n The hideous troll.\n The vicious troll.\n You are in the trolls clearing.\n Visibles exits are: southwest southeast north\n Thorin enters.\n You see:\n The hideous troll.\n The vicious troll.\n Parece que los gráficos no van a mejorar... Debajo de lo que parece ser un claro de un bosque aparece...\n You are in the trolls clearing.\n Visibles exits are: southwest southeast north\n Thorin enters.\n You see:\n The hideous troll.\n The vicious troll.\n You are in a gloomy empty land with dreary hill ahead.\n To the west there is the round green door.\n Visibles exits are: east northeast Thorin enters.\n You are in a gloomy empty land with dreary hill ahead.\n To the west there is the round green door.\n Visibles exits are: east northeast Thorin enters.\n The hideous troll eat you.\n His foul gluttony has killed the hideous troll.\n You are dead.\n You have mastered the 2.5% of this adventure.\n ¿Me ha comido? ¡Oh vamos!\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n Thorin sits down and starts singing about gold.\n You see the wooden chest.\n The hideous troll eat you.\n His foul gluttony has killed the hideous troll.\n You are dead.\n You have mastered the 2.5% of this adventure.\n Parece que la has cagado.\n You are in a comfortable tunnel like hall. To the east there is the round green door.\n You see:\n The wooden chest.\n A curios map.\n Thorin.\n Thorin says: Hurry up!\n You cannot go west.\n You cannot go south.\n You cannot go north.\n You cannot go east.\n You cannot go southwest.\n You cannot go southeast.\n You cannot go northwest.\n You cannot go northeast.\n En la pantalla aparece el siguiente mensaje:\n What?\n ¡Este estúpido ordenador no entiende nada de nada!\n Tras lo que pueden haber sido horas vuelves poco a poco en ti...\n \n\n\n\n Las Aventuras de Rudolphine Rur\n Una aventura de Dwalin\n Betatesters: Uto, Diego, Rocío y Jenesis\n Programada con el Superglús de Uto, YokiYoki y Baltasar el Arquero\n Gracias a Adeptus por sus ideas y a Lenko, Diyey y Urbatain por su reportes.\n (c) 2005 Dwalin\n\n REVISIÓN 2 - Recompilada en enero de 2015 para ngPAWS\n\n La Casa del Árbol. Es decir, el nombre con el que llamas cariñosamente a tu casa. En realidad no es gran cosa, una sola habitación donde se hacinan tu pequeño catre, tus libros, tu escasa ropa, tu taller de objetos mágicos, fotografías de todos tus viajes y ennegrecidos enseres de cocina. A través de la puerta y la ventana puedes oír a los pájaros cantar cuando sale el sol, por lo que decidiste vender tu último reloj (¡de cuco!). En un rincón, la chimenea permanece apagada... ¡desde por lo menos 1888! El último gran invierno cuando se heló el lago y estrenaste unos nuevos patines... que no sabes donde están. En definitiva, home sweet home, como reza el felpudo de dudoso gusto que tu madre colocó junto a la puerta y ¡aún no te has atrevido a quitar!\n La LoCalidad VirtuaL de los ObjeTos-No-CreaDos.\n El viejo invernadero del Doctor presenta un aspecto muy descuidado desde que este se volvió demasiado viejo o demasiado aburrido para cuidarlo. Pasaste tu niñez entre sus plantas, escuchando las historias que el Doctor repetía una y otra vez, pero que a todos os encantaba escuchar. Ahora que el viejo ha desaparecido las plantas se han rebelado contra la estrechez de sus macetas y con brío se han lanzado a la conquista de más espacio vital. Es la guerra: palmeras contra hortensias, lirios y rosales, todos luchan por los mejores rayos de sol, el agua más fresca y la tierra más rica. Dan miedo.\n Estás en el porche de tu elevada casa. El 'porche' es en realidad una plataforma de madera de aproximadamente 5x3 metros ante la puerta, robustas columnas sostienen un desvencijado techo de teja que proporciona sombra al porche y lo protege de la lluvia... y ¡la nieve! Construida sobre un viejo árbol, la posición privilegiada de tu casa te permite tener una envidiable vista del bosque circundante y los sombríos pero a la vez familiares picos que separan el Valle del mundo humano exterior. Junto a la puerta y bajo la ventana se encuentra tu querido viejo banco de madera, construido artesanalmente por tu propio abuelo, tu lugar favorito de relajación en las largas noches de verano. Asomándote con cuidado al borde de la plataforma puedes ver abajo el claro del bosque.\n El bosque, verde, limpio y húmedo por las recientes lluvias rodea un pequeño claro, donde se haya tu casa. Bueno, tu árbol, y en la cima de este tu casa. Con su verde suelo, tapizado de un cuidado césped, este es uno de los claros más 'chic' de esta parte del Valle (¡como recuerdas cada mes cuando llega el recibo de la hipoteca!), la envidia de muchos gnomos. El claro sirve también como cruce para varias sendas, estas, bien cuidadas y delimitadas por piedras, se pierden en varias direcciones adentrándose en el bosque. Junto a tu árbol se alza, en precario equilibro tu viejo buzón postal, una antigualla que encontraste tirada por ahí y decidiste aprovechar cuando estrenaste tu recién conquistada independencia. Entre el buzón y el árbol se encuentra tu ingenioso sistema 'elevador'.\n Esta es la localidad encima-de-la-plataforma elevadora para los objetos que pongamos allí.\n Esta es la localidad en-el-interior-del-buzón.\n La senda te ha conducido frente al viejo invernadero del Doctor. Extraño personaje, el único humano que has visto visitar con asiduidad el Valle... Se mandó construir este invernadero con paredes de cristal porqué decía que no había tierra como la de este lugar para hacer crecer las plantas, y que aquí todo vegetal acababa por tener elementos beneficiosos para la salud. Los viejos curanderos gnomos movían la cabeza y no osaban contradecirlo, pero sabes de buena tinta que más de uno se ha alegrado de no volverlo a ver por aquí en muuucho tiempo. Las paredes del viejo invernadero todavía brillan cuando sobre ellas inciden los rayos del sol, aunque a su alrededor (¡y en su interior!) la vegetación lo ha invadido todo.\n Has llegado a una de las partes más viejas del bosque. Los árboles de este claro ya habían crecido y caído miles de veces antes que ningún gnomo, o cualquier otro habitante del bosque llegase aquí. Se trata pues de árboles viejos, carcomidos y caprichosos, algunos aún se yerguen, doblados bajo el peso de los años, pero orgullosos de su pasado, y rumiando viejas historias para sus raíces. Otros, como el viejo tocón que tienes ante ti ya no soportó su última tala, y es testigo mudo del paso del tiempo. Ningún habitante del bosque osaría construirse una casa en uno de estos árboles, quién sabe que achaques pueden sobrevenirles en un frío invierno, por lo que es en el suelo donde algunos han buscado cobijo. Ante ti, a la sombra del tocón se yergue una coloreada seta.\n Aquí estás casi en el borde del bosque. Un amplio camino entre los árboles conduce a las montañas, y más allá al mundo humano. Recuerdas la intensa emoción de esperar en este camino la llegada de tu padre o alguno de tus hermanos cuando volvían de una de sus cada vez más peligrosas excursiones a la ciudad, y la vez que por este mismo camino llegó el propio Doctor conduciendo su flamante automóvil. Ahora el camino está mucho menos transitado, y las hojas lo cubren. A lo lejos (¡muy lejos!) se alzan las montañas que rodean el Valle.\n En esta parte del bosque los árboles son jóvenes y crecen vigorosos. Al abrigo de sus recias ramas construisteis tú y tu hermano Agostine una coqueta caseta para la mascota familiar: vuestro zorro BM. Este claro, no tan transitado como aquel donde se alza tu árbol es el lugar ideal para el descanso, los juegos y las reuniones familiares a las que acude tu amplia familia. Junto a la caseta de BM se celebró tu fiesta de mayoría de edad... ¡aún rememorada por los más juerguistas! En estos meses de otoño, sin embargo, el claro permanece vacío y silencioso.\n Hasta tus oídos llega el agradable murmullo del agua que cae por la pequeña cascada que tienes ante ti. El pequeño riachuelo que atraviesa el Valle sortea la orografía del terreno formando un gracioso salto de agua. El pequeño lago (ummm ¿laguna? ¿charco? más bien) es lugar de confluencia y diversión para gran parte de los habitantes del Valle en los calurosos meses de verano. Ahora mismo tan solo la espesa vegetación pugna por un buen sitio ante la orilla. El riachuelo se pierde hacia el sur entre los árboles.\n El amplio camino termina ante las montañas. Aquí se bifurca en dos direcciones, por un lado la antigua ruta a través de las montañas, tradicional vía de comunicación entre el Valle y el mundo exterior, y por otro lado una nueva carretera, pavimentada, cómoda, pero mucho más larga que se abre paso a través del desfiladero bordeando las altas cumbres. Sin lugar a dudas la nueva ruta es más cómoda y directa, pero el viejo camino a través de las montañas puede guardar extrañas sorpresas en sus entrelazadas sendas.\n Te estás internando en los estrechos senderos que atraviesan las montañas: antiguas vías pecuarias, caminos abiertos por cazadores, rutas hacía pueblos abandonados hace tiempo y que se cierran cuando llegan las nevadas... Intentas tomar como punto de referencia los nevados picos, pero, poco a poco vas perdiendo el sentido de la orientación. ¿No es la tercera vez que pasas por delante de esa roca? Parece que estás algo perdido entre los montes.\n Te estás internando en los estrechos senderos que atraviesan las montañas: antiguas vías pecuarias, caminos abiertos por cazadores, rutas hacía pueblos abandonados hace tiempo y que se cierran cuando llegan las nevadas... Intentas tomar como punto de referencia los nevados picos, pero, poco a poco vas perdiendo el sentido de la orientación. ¿No es la tercera vez que pasas por delante de esa roca? Parece que estás algo perdido entre los montes.\n Te estás internando en los estrechos senderos que atraviesan las montañas: antiguas vías pecuarias, caminos abiertos por cazadores, rutas hacía pueblos abandonados hace tiempo y que se cierran cuando llegan las nevadas... Intentas tomar como punto de referencia los nevados picos, pero, poco a poco vas perdiendo el sentido de la orientación. ¿No es la tercera vez que pasas por delante de esa roca? Parece que estás algo perdido entre los montes.\n ¡Entre los nevados picos has hallado una extraña casa! Por su estructura parece imitar vagamente la silueta de un navío, aunque la robustez del tejado (para poder soportar las nevadas de las montañas) y lo rústico de los acabados no consiguen transmitir del todo esa ilusión. Se trata sin duda de la guarida del malvado pirata. La casa de un hombre de mar perdido entre frías montañas. Extraño, si no fuera por las historias que has oído desde niño de piratas que viven sobre y bajo las montañas, en misteriosos pasajes entrelazados y en sospechosa convivencia con malcarados enanos.\n Te estás internando en los estrechos senderos que atraviesan las montañas: antiguas vías pecuarias, caminos abiertos por cazadores, rutas hacía pueblos abandonados hace tiempo y que se cierran cuando llegan las nevadas... Intentas tomar como punto de referencia los nevados picos, pero, poco a poco vas perdiendo el sentido de la orientación. ¿No es la tercera vez que pasas por delante de esa roca? Parece que estás algo perdido entre los montes.\n Te estás internando en los estrechos senderos que atraviesan las montañas: antiguas vías pecuarias, caminos abiertos por cazadores, rutas hacía pueblos abandonados hace tiempo y que se cierran cuando llegan las nevadas... Intentas tomar como punto de referencia los nevados picos, pero, poco a poco vas perdiendo el sentido de la orientación. ¿No es la tercera vez que pasas por delante de esa roca? Parece que estás algo perdido entre los montes.\n Te estás internando en los estrechos senderos que atraviesan las montañas: antiguas vías pecuarias, caminos abiertos por cazadores, rutas hacía pueblos abandonados hace tiempo y que se cierran cuando llegan las nevadas... Intentas tomar como punto de referencia los nevados picos, pero, poco a poco vas perdiendo el sentido de la orientación. ¿No es la tercera vez que pasas por delante de esa roca? Parece que estás algo perdido entre los montes.\n Esta es la localidad-en-el-interior-de-la-Guarida-del-Malvado-Pirata: sólo objetos y similares.\n Vistas desde el lado 'humano' las montañas circundantes del Valle parecen menos altas y menos amenazadoras, pero como muy bien sabe la tradición, aquel que se interna por sus senderos puede verse abocado a extraños encuentros y entrelazados pasajes. Estas leyendas, firmemente arraigadas en las mentes de los humanos de la región han protegido al Valle y a sus habitantes de molestos visitantes durante siglos... ¿Hasta cuando durará este aislamiento? Para volver al Valle puedes utilizar la pavimentada carretera o usar las rutas montañosas.\n Más lejos de lo que este rápido viaje entre las montañas y este sucio callejón puede transmitir, se alza la Gran Ciudad, la ciudad humana más próxima al Valle. Desde hace algunos años el goteo de gnomos hacía las oportunidades de trabajo, diversión y formación que la ciudad ofrece ha sido constante. Tu hermano Agostine fue de los últimos que marchó hace ahora algunos años. No tienes muy clara la reacción humana ante un gnomo en la ciudad, pero si has de creer aquello que has oído, los humanos han dejado hace años de creer en la existencia de seres distintos a ellos. Si el hombre es la mesura de todas las cosas, al gnomo y al elfo se le niega su existencia, con lo que no debes temer que te tomen por nada más que un pequeño y extravagante vagabundo.\n Te aprietas contra la pared del edificio que tienes a tus espaldas, bajando la cabeza tratando de pasar desapercibido entre el bullicio de la ciudad. Gente, automóviles, tiendas... y más gente. No entiendes cómo un gnomo (¡o un humano!) quisiera vivir aquí, entre el tráfico, los ruidos, y sin un árbol cerca. Bueno, cerca sí, ya que al otro lado de la calle puedes ver la entrada del Parque Central. Junto a ti se alza también un semáforo.\n Más allá de la verja se extiende el Parque Central, el auténtico pulmón verde de la Gran Ciudad. No te extraña que Agostine eligiera este lugar para vivir, ya que por lo que puedes ver desde aquí, parece ser lo más parecido al Valle en millas a la redonda. Una oscura verja rodea el amplio parque, pero por suerte a estas horas las puertas aún permanecen abiertas a los posibles visitantes. La mayoría de los humanos, sin embargo, parecen demasiado ocupados como para demorarse un poco en las verdes estancias del parque. Mejor para ti.\n Sigues un cuidado camino que se adentra hacia el interior del Parque, en busca de la 'fuente fantasía' dónde parece ser que tiene ubicada su morada Agostine. Bajo el entrelazado techo vegetal y con el sol que te da en la cara (¡y te hace cerrar los ojos!) piensas que después de todo quizá no deba ser tan mala la vida en la ciudad, lejos de molestos vecinos, hambrientas plantas carnívoras, cofres ladradores y zorros rencorosos...\n Te detienes ante lo que sin duda deber de ser la llamada por Agostine, Fuente Fantasía. Nombre adecuado, sin duda. Te asombras de que algún humano haya tenido la sensibilidad de tallar las figuras que adornan la fuente, dos delicadas imágenes de dos niños o elfos o ninfas silvestres en ¿mármol? verde. La fuente en si no es muy grande, pero es lo suficientemente alta como para no que no te valga la pena ni siquiera intentar trepar hasta el agua, y mucho menos hasta las imágenes. Además, ¿quién se fiaría del agua clorada por los humanos? ¿quién sabe a que extraños procesos químicos la someten? ¿y si olvidaras que eres un gnomo, zapatero para más datos, y te convirtieras en algo así como un humano, pequeño, peludo y malhumorado? Vaya... ya empiezas a pensar como un verdadero pueblerino.\n ¡Qué desorden! La casa de Agostine es digna de verse. Los esfuerzos de tu madre para conseguir que sus hijos fueran modelo de pulcritud y orden gnómico no se han cumplido con Agostine. La estancia está en el más completo desorden, como si un huracán hubiera pasado por aquí. Te preguntas como Agostine puede vivir en medio de este caos. Libros, montones de ropa, herramientas, vetustas cintas de cassete y decenas de objetos más se amontonan aquí y allá, incluso sobre el omnipresente ordenador, que preside la estancia... Por cierto, tal y como te temías, no hay rastro de Agostine por ningún lado.\n ¡Parece que hayas cambiado de casa! Todo lo que en otras estancias es viejo, antiguo y descuidado ha pasado en esta a ser nuevo, limpio y luminoso. Esta estancia configura un moderno despacho en el que no falta su mesa, sus estantes, su teléfono y su ordenador (¡portátil!). La pared, pintada de un curioso color cereza desprende una agradable calidez, y está decorada por cuadros. Al otro lado del despacho, hacia el este se adivina otra estancia.\n En contraste con el despacho esta estancia está desolada, parece que el buen gusto o el dinero utilizado en el despacho terminó de pronto. Aquí parecen haberse amontonado gran parte de los muebles viejos o demás objetos inservibles que los elfos encontraron en la casa cuando la alquilaron.\n Te encuentras ahora en un recargado salón. Las paredes y el suelo están recubiertos de madera. Hay multitud de objetos en aparente estado de deterioro, como si varias decenas de gnomos adolescentes hubieran alquilado la casa de una vieja señora. De todas formas, los muebles, las lámparas, los libros amontonados por doquier, la pequeña biblioteca que se insinúa a un lado... todo sugiere un pasado si no aristocrático si quizá burgués, que, por desgracia, pasó hace ya mucho tiempo.\n Te aprietas contra un recodo de la pared para que el mayordomo humano no te vea. A veces el pequeño tamaño de los gnomos es una ventaja. La cocina es quizá la estancia más agradable que has visto hasta ahora de la casa, en realidad en este frío otoño cualquier lugar caliente lo es. La cocina es vieja, bueno, más que vieja, antigua, el horno, las mesas, todo rezuma un aroma a años de guisos y pucheros. Afortunadamente (para los elfos) todo parece muy limpio, el mayordomo humano parece eficiente. Olisqueas el aroma del guiso que está preparando mientras recuerdas con pena cuando fue la última vez que comiste.\n No sabes como has llegado hasta aquí... Tan sólo recuerdes que estabas enfrente de la casa de Agostine, y que aparecieron dos elfos y ahora... Parece que te han encerrado en un abuhardillado trastero. El techo es bajo (incluso para un gnomo) y está repleto de trastos: viejas cajas y multitud de otros objetos quien sabe si inservibles. El aire está como viciado, huele a polvo y moho. En el suelo hay una trampilla, y en una de las paredes se abre una pequeña ventana.\n Estás en un cuidado jardín trasero donde puedes apreciar el buen gusto élfico por flores y plantas. Los elfos, como todo el mundo sabe son altivos, vanidosos, creídos, orgullosos e incluso malvados, pero son buenos jardineros... ¡que se le va a hacer! Comparado con el jardín la casa no es gran cosa, menos cuidada de lo que podías esperar tan solo tiene una altura, amén de la buhardilla-trastero desde el que caíste... ¡y menos mal que no estaba más alto! Los gnomos, desgraciadamente, no siempre caen de pié.\n El garaje de la casa está prácticamente ocupado en su totalidad por dos grandes automóviles... ¡parece que no les va nada mal en la vida a los elfos-matones estos! La puerta del garaje se abre en vertical, mediante un mecanismo automático ¡al que no piensas acercarte! En el poco espacio que no ocupan los autos se amontonan algunas herramientas y más trastos.\n Estás en el recibidor-distribuidor de la casa, este es amplio y desde él puedes acceder a varias estancias. Sobretodo llama la atención la escalera que sube al piso superior, que se alza en medio del recibidor, justo delante de la puerta de salida. Hay algo raro en este lugar, está como vacío, de muebles, de vida, no sabes muy bien que sensación te produce, pero parece que a la casa le falte esa chispa o ese calor que tiene toda casa habitada, te recuerda a una habitación de hotel o a un apartamento de vacaciones. Quizá esta casa tan sólo sea una tapadera, o un lugar de paso para los elfos, una avanzadilla en el corazón de la Gran Ciudad humana, o quizá no, queda tan lejos del entendimiento de un gnomo como tu el pensamiento insidioso y altivo de los elfos.\n Estás en el interior de la gran caja de cartón. Ciertamente cabía un gnomo aquí dentro, pero encogido, agachado y apiñado.\n Sigues en el jardín alrededor de la casa, ahora estás en la parte central del mismo. Desde aquí puedes ver la fachada lateral de la casa, en la que, como en la fachada trasera, se abren cuatro ventanas, dos en la planta baja y otras dos en el primer piso. Un pequeño escalón te permite llegar hasta una de las ventanas. Desde aquí puedes ver también una construcción al este, lo que parece el garaje... Los humanos (y al parecer también los elfos) construyen casas para sus vehículos... algo parecido a la caseta de BM. Hacia el sur está la puerta de entrada a la casa.\n Estás justo delante de la puerta de entrada a la casa. Desde aquí ves toda la fachada principal, pintada de blanco (encalada, más bien), con las ya clásicas ventanas cubiertas de gruesos cortinajes. No sabes ya muy bien si se trata de una casa de elfos o de vampiros... vamos, que no les parece gustar mucho la luz del sol... o quizá tienen algo que esconder... La puerta de entrada está pintada de un curioso color azul fuerte y contiene además unos graciosos adornos florales. Junto a la puerta, un timbre invita a ser llamado.\n Aquí está la verja exterior de la propiedad, que la separa de la calle. Se trata de una verja no muy alta para los estándares humanos (o élficos), pero que para un gnomo como tú entraña un más que serio inconveniente. No obstante, en la verja se abre una amplia puerta, tan amplia como para permitir la entrada de automóviles. Abierta o cerrada, este debe ser el camino hacia la libertad... tuya y de Agostine... por supuesto.\n Te detienes ahora en un pasillo del piso superior, junto a las escaleras que bajan hasta la planta baja. Hacia el este distingues una estancia iluminada, lo que desde aquí parece un despacho. En el techo distingues también una obertura, sin duda se trata de la trampilla que da acceso al desván en el cual te encerraron. Te vuelve a hervir la sangre al pensar como te trataron estos elfos a ti y a tu hermano Agostine... y todo por un CD-Rom. Si consigues salir de esta tendrás que hablar seriamente con Agostine sobre el lío en que se ha metido.\n Esta-es-la-localidad-caja-fuerte una vela un libro tu sombrero un martillo la misteriosa llave una caja de cerillas un paraguas un arenque rojo una pesada piedra un trozo de vidrio una carta un telegrama una regadera un frasco un tapón de corcho una pizca de pimienta una flor seca una salchicha una salchicha un tridente una nota un periódico un disquette de ordenador un cd-rom una pastilla de jabón un rotulador una caja de cartón un pañuelo un estetoscopio una sartén